REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN

 

PROCESO LIBERTICIDA

 

 

 

Gervasio Portilla | 21.09.2023


 

 

 

La acción de lo que se llama nueva política, no consiste en que los servicios funcionen mejor, y que los ciudadanos se sientan felices, sino de todo lo contrario, se trata de obstaculizar la libertad, insuflar miedo, mentir mucho y tener con mentiras muchas veces repetidas, atemorizada a la sociedad.

Por ejemplo: Los ciudadanos no podremos entrar con nuestros vehículos en el centro de las ciudades, pero el político de turno, podrá viajar en un avión ejecutivo donde quiera y como quiera.

No habrá dinero para atender como es debido, en sus prestaciones diarias a los enfermos de ELA y por supuesto no tienen derecho a una especial protección, pero habrá dinero para más asesores y “pinganillos” en el Congreso de los Diputados.

No habrá dinero para grandes obras de infraestructura en las provincias y regiones fieles a la ley y la Constitución, pero si se atenderá cuanto sea necesario a las Comunidades donde sus dirigentes quieren independizarse.

Es el mundo al revés, que crean personajes sin ética ni moral, que aspiran a vivir como dictadores enmascarados de demócratas.

Estamos en un proceso global de destrozar el sentido de la realidad y la verdad, porque una vez que se consiga, es muy fácil dirigir naciones y poderes.

El marco “globalista”, tan defendido por el Sánchez, no es más que un proceso liberticida que quiere “arrasar” con los derechos individuales y quiere imponer un pensamiento único, a través de “desquiciar” a la sociedad, dejarla sin esperanza y sin ganas de luchar por vivir mejor.

 

 

Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista