Colaboraciones
Nunca como hoy se ha proclamado tanto y con tanta fuerza la libertad como un valor supremo, y nunca como hoy también se ha conculcado tanto
27 enero, 2025 | Javier Úbeda Ibáñez
Nunca como hoy se ha proclamado tanto y con tanta fuerza la libertad como un valor supremo, y nunca como hoy también se ha conculcado tanto. Precisamente en nombre de la libertad se justifican hoy toda clase de ataques a la libertad y a los derechos fundamentales de la persona humana. Es el mismo hombre quien, al no asumir la responsabilidad que la libertad comporta, levanta las barreras o pone los obstáculos o impedimentos que se oponen a la felicidad propia y ajena en el seno de la sociedad.
En una sociedad en donde no se reconoce ninguno de los principios morales fijos, en donde se enseña que todo es relativo y subjetivo y que nada debe considerarse sagrado ni merece un respeto absoluto, no es de extrañar que muchos terminen, de hecho, por no respetar nada en absoluto, por no respetar ni lo personal ni lo social, ni propiedad, ni ley, ni libertad, ni vida.