EL EVANGELIO DEL DOMINGO
por Gervasio Portilla García
13.06.2021
XI Domingo del Tiempo Ordinario (B)
LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS (4, 26-34)
En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud:
― «El Reino de Dios se parece a un hombre que echa semilla en la tierra: Él duerme de noche y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo fruto sola: primero los tallos, luego la espiga y después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega».
Dijo también:
― «¿Con qué podemos comparar el reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos? Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la más pequeña de las semillas; pero después de sembrada crece, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros del cielo pueden anidar a su sombra».
Con muchas parábolas parecidas les exponía la palabra, acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas; pero a sus discípulos se lo explicaba todo en privado.
Palabra del Señor
COMENTARIO:
La predicación del Señor se realiza muchas veces a través de parábolas. La primera de las parábolas del Evangelio de este domingo Undécimo del Tiempo Ordinario, recoge la siembra, del grano que un hombre echa en la tierra y luego se olvida de todo el trabajo que viene después: la poda, la preocupación por el mal tiempo, las heladas, la sequía…¿Por qué hace esto?. Porque tiene que inculcar a los predicadores que la semilla crece, se desarrolla de forma inexorable a pesar de las resistencias, la persecución. El discípulo de Jesús debe desterrar toda angustia, toda ansiedad o tentación de abandono.
La segunda parábola, la del grano de mostaza, halla su sentido en el contraste y en la continuidad entre la pequeñez del punto de partida y la magnitud del punto de llegada.
Hasta el próximo Domingo si Dios quiere. Paz y bien.