Iglesia-Estado

 

Cartas Bolaños-Cobo (y III). El ministro afirma que la Iglesia Católica acepta el plan de resignificación del Valle

 

Dice Bolaños que así quedó constancia tanto por escrito como en las reuniones mantenidas por el Gobierno con el arzobispo de Madrid

 

 

 

20/12/25


 

 

 

En el proceso de resignificación de la Basílica del Valle de los Caídos, el interlocutor con el arzobispo de Madrid por parte del Gobierno ha sido el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños. Religión Confidencial ha tenido acceso a la carta que, el pasado 11 de marzo de 2025, Bolaños envió a la Ministra de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez García.

 

 

 

  1. La Iglesia acepta la resignificación
  2. Que permaneciera la comunidad benedictina
  3. La sacralidad de la basílica

 

 

 


La embajadora de España ante la Santa Sede,
Isabel Celaá, Cobo y Bolaños
en la toma de posesión como cardenal
del arzobispo de Madrid.

Foto: Moncloa.

 

 

 

El Ministro de tres carteras comenzaba así. “Como sabes, en el marco de las gestiones que estamos llevando a cabo en relación con la situación de la Basílica en el proyecto de resignificación del Valle de Cuelgamuros, me he reunido recientemente tanto con el Arzobispo de Madrid, Mons. Cobo, como el cardenal Parolin, secretario de Estado de al Santa Sede”.

“A través de estas conversaciones -sigue diciendo el Ministro-, y mediante la carta que adjunto para tu conocimiento, han sido informados de los aspectos esenciales para la licitación del concurso internacional de ideas previsto para la citada resignificación”.

 

La Iglesia acepta la resignificación

“A estos efectos, se ha recibido respuesta de Mons. Cobo en la que se expresa la decisión de la Iglesia Católica de aceptar el proceso de resignificación del Valle en los términos comunicados por el Gobierno, tanto por escrito como en las reuniones mantenidas, y que dieron lugar a la respuesta del cardenal Cobo que te adjunto”.

El ministro adjunta la documentación ya publicada por Religión Confidencial.

Por último, Bolaños escribe: “Asimismo, te anticipo que ya nos han transmitido la propuesta de una persona para formar parte del jurado del concurso cuyo currículum vitae adjunto para tu conocimiento. Te traslado esta información a los efectos que correspondan a tu ámbito de competencia”.

La persona, “para formar parte del jurado del concurso” de la que daba traslado el ministro es el sacerdote Daniel Escobar Portillo, actual delegado de Liturgia de la Archidiócesis.

 

Que permaneciera la comunidad benedictina

En el comunicado del arzobispado de Madrid del 16 de abril se decía que “además, se estableció que una persona propuesta por la Iglesia Católica revisará el proyecto final ganador del concurso antes de su ejecución para asegurar que los acuerdos son respetados y las intervenciones son acordes con las normas litúrgicas”.

Y en la intervención del cardenal Cobo en la presentación de la Memoria de Actividades de la Provincia Eclesiástica distinguió dos fases claras en su implicación:

Primera fase: negociar un “marco mínimo” con el Gobierno. En estas negociaciones iniciales, según Cobo, su objetivo principal fue garantizar la sacralidad de la Basílica y que permaneciera la comunidad de monjes, así como todos los signos religiosos presentes en el recinto. La insistencia, dice, era que no se borrara la identidad religiosa del lugar. Esta línea de actuación ya la había adelantado con anterioridad: en varias declaraciones públicas, Cobo había marcado como inviolables la basílica y la comunidad monástica.

 

La sacralidad de la basílica

Segunda fase: el concurso de ideas para la resignificación. En esta etapa, el arzobispado tuvo, según el cardenal, una participación muy limitada: no ha participado directamente en el concurso ni en la votación de las propuestas ganadoras. Su labor ha sido de asesoramiento, para “defender la sacralidad de la basílica” y evitar que elementos religiosos sean eliminados del proyecto.

Cobo explica que la interlocución se ha mantenido: la Santa Sede para asuntos relativos a la basílica (templo pontificio), y los benedictinos para el tema propio de la abadía.