Diócesis
La Vicaría del clero madrileña propone como prioridad “que nace del corazón de nuestro pastor” para el encuentro de los presbíteros de la archidiócesis que se acojan a las propuestas del Obispo
12/09/25
Tal y como aparece en la carta pastoral titulada de forma original “Al inicio del curso 2025-2026”, que acaba de hacer pública el arzobispo de Madrid, cardenal José Cobo Cano, dentro de las líneas de trabajo común para esta curso, además de la implantación del catecumenado de adultos y la formación “diocesana” del laicado, el impulso de la pastoral juvenil y vocacional y la sinodalidad, entre otros, se encuentra la Asamblea Presbiteral y la restructuración territorial y la construcción de nuevos templos.
- Los sacerdotes, protagonistas
- Identidad sacerdotal
- Plataforma digital de la Vicaría del Clero
- “Un encuentro entre nosotros”
- Reestructuración territorial de la diócesis
El cardenal José Cobo,
a los nuevos sacerdotes de la diócesis de Madrid.
Los sacerdotes, protagonistas
En un momento de intensidad sinodal en la Iglesia, que implica la participación de “todos, todos, todos”, la primera apuesta asamblearia es una cuyos protagonistas son sólo sacerdotes. Se celebrará los días 9 y 10 de febrero en el Seminario Conciliar de Madrid.
El tema que guiará el encuentro será “¿Qué sacerdotes necesita hoy Madrid?”, un momento calificado en el escrito como “especial donde nos reuniremos todos los sacerdotes con ministerio pastoral en nuestra diócesis”.
En la carta se dice que “conllevará un trabajo previo y otro posterior a la asamblea en el que se quiere contar no solo con los sacerdotes sino también con las comunidades cristianas a las que sirve”.
Identidad sacerdotal
Por eso, “con las propuestas surgidas elaboraremos un marco en el que cada comunidad y cada ministro ordenado pueda sentirse reflejado y posibilite emprender nuevos caminos y fortalecer la identidad sacerdotal, la espiritualidad y la caridad pastoral”, señala el texto firmado por el cardenal Cobo.
En otro momento de la Carta Pastoral se señala que “no podemos olvidar la tríada consagrada por el Sínodo: “Trasparencia, rendición de cuentas y evaluación”, y en la que está comprometida la Archidiócesis de Madrid”.
Plataforma digital de la Vicaría del Clero
En la carta pastoral no se ofrecen más pautas sobre la Asamblea Presbiteral, que sí se dan en la comunicación que los sacerdotes de Madrid han recibido a través de la plataforma digital de la Vicaría del Clero, a la que ha tenido acceso Religión Confidencial.
Firmada por Luis López, a partir de lo que se dice en la Carta pastoral, se añade la “Propuesta que nace del corazón de nuestro pastor”.
La primera de ellas, resaltada con un icono, es “Acoger desde la realidad del clero de Madrid la propuesta del Obispo. No podemos vivir con la mentalidad de que todo sigue igual. El cambio de época afecta al momento cómo uno se concibe sacerdotes (sic)”.
“Un encuentro entre nosotros”
También se añade que “no es un congreso de espiritualidad, no es un simposio de teología, no es una asamblea reivindicativa. El acento se sitúa en el encuentro entre nosotros, festivo, oracional, con una mirada a los que nos han precedido, la reflexión sobre nuestro quehacer, constatar cómo estamos y ponernos juntos con el pueblo de Dios ante los retos evangelizadores”.
Un párroco que ha recibido esta comunicación señala a Religión Confidencial que es importante destacar que se especifique la propuesta de “acoger desde la realidad del clero de Madrid la propuesta del Obispo, como si se tuviera la impresión de que no es así”.
Y también que “la referencia a la naturaleza no reivindicativa de la Asamblea Presbiteral parece oportuna toda vez que una parte del clero de Madrid se ha caracterizado por ser reivindicativo y crítico en épocas pasadas, incluso con sus pastores. No pocos de los sacerdotes que ejercían ese rol son ahora los que están diseñando esta Asamblea”.
Reestructuración territorial de la diócesis
Respecto a la reestructuración territorial de la diócesis, en la Carta Pastoral se dice que se “establecerán las unidades pastorales y la rectificación de límites parroquiales y de arciprestazgos”, además de la “reestructuración de las vicarías territoriales”. Todo ello supondrá una “reestructuración del clero y la revisión de la dedicación efectiva de los sacerdotes según las nuevas realidades”.
Nadie duda de que la experiencia del éxito que el cardenal Omella ha tenido en la reestructuración de la archidiócesis de Barcelona será tenida en cuenta en Madrid.