Tribunas
30/07/2025
Ilusionante ejemplo de la la hermana Clare
Alberto García Chavida
Hna. Clare. Hogar de la Madre.
Con alguna frecuencia, escuchamos comentarios negativos acerca del comportamiento generalizado de los jóvenes. No es algo nuevo. Un médico de familia inglés, Ronald Gibson, comenzó una conferencia sobre conflictos generacionales, recitando:
1) “Nuestra juventud gusta del lujo y es mal educada, no hace caso a las autoridades y no tiene el menor respeto por los de mayor edad. Nuestros hijos hoy son unos verdaderos tiranos. No se ponen en pie cuando entra una persona anciana. Responden a sus padres y son simplemente malos”.
2) “Esta juventud está malograda hasta el fondo de su corazón. Muchos jóvenes son malhechores y ociosos. Jamás serán como la juventud de antes. La juventud de hoy no será capaz de mantener nuestra cultura”.
Después, el conferenciante aguardó unos instantes a que se acallasen los murmullos de la gente, y entonces reveló el origen de las frases mencionadas:
La primera frase es de Sócrates (470 - 399 a.C.) La segunda estaba escrita en un vaso de arcilla descubierto en las ruinas de Babilonia (actual Bagdad), con más de 4.000 años de existencia.
La verdad es que uno puede encontrarse cosas muy buenas, donde menos se lo espera. Unos días atrás, coincidí en el vestuario del gimnasio con un chico que llevaba tatuado “Todo tiene arreglo menos la muerte”, sin miedo a la vida y sin miedo a la muerte. Y así ha de ser, y si alguna vez tenemos la desgracia de apartarnos de Dios, hacemos de hijo pródigo y a comenzar de nuevo.
La joven Clare, de 17 años, llegó a España desde Irlanda en la Semana Santa del año 2000 para participar en un encuentro de oración. Clare, de apariencia atractiva y con una personalidad arrolladora, creía tener claro su futuro: con tan sólo 15 años ya había sido presentadora de programas juveniles y le esperaba una prometedora carrera como actriz de Hollywood. Esa Semana Santa en España supuso mucho para ella, pero su primera conversión duró poco. Clare volvió a Irlanda y continuó con su vida como actriz.
Una noche, al salir de fiesta se excedió con el alcohol y se dirigió al baño de una discoteca. Fue allí cuando cambió de vida para siempre. A pesar de los atractivos planes que le ofrecía su mánager y la presión de su familia, el 11 de agosto de 2001 decidió entregar su vida a Dios como candidata de las Siervas del Hogar de la Madre.
El 16 de abril de 2016 murió bajo los escombros provocados por un fuerte terremoto que sacudió Ecuador. Su proceso de beatificación se inició el 12 de enero de este año en la Catedral Magistral de los Santos Niños Justo y Pastor de Alcalá de Henares.