Vaticano
Mons. Xuereb presenta 'Mis días con Benedicto XVI': “Su renuncia no fue una falta de valor”
El actual nuncio del Papa Francisco en Marruecos que fue segundo secretario de Ratzinger afirma: "Su imagen pública se conoce de forma parcial, cuando no distorsionada"
14/12/24
- Revelar la sensibilidad de Benedicto XVI
- "No fue una falta de valor"
- Compartir las conmovedoras historias de Benedicto
- Doctor de la Iglesia
- Lo que pensaba Benedicto XVI de España
Mons. Alfred Xuereb, primero por la derecha,
acompañado del Nuncio de España, Bernardito Azúa,
José Francisco Serrano presentador del libro
y un sacerdote colaborador de la nunciatura.
La cripta de la Pontificia Basílica de San Miguel fue el escenario de presentación, ayer viernes, del libro de Mons. Alfred Xuereb, que fuera segundo secretario de Benedicto XVI y en la actualidad es Nuncio del Papa Francisco en Marruecos, “Mis días con Benedicto XVI” (Ediciones Palabra), un precioso testimonio de la cercanía y afecto filial al Papa Benedicto.
Al acto asistieron entre otros, el Nuncio de Su Santidad en España, monseñor Bernardito Cleopas Auza, y el Rector de la Basílica de San Miguel, don Pío Santiago Amar.
Revelar la sensibilidad de Benedicto XVI
En un sencillo y emotivo encuentro, después de la presentación del libro a cargo del catedrático de periodismo de la Universidad CEU San Pablo, y colaborador de Religión Confidencial, José Francisco Serrano, Monseñor Alfred Xuereb, tuvo una destacada intervención en la que señaló que “el propósito del libro es revelar la sensibilidad y el rasgo -y por tanto el alma- de un pontífice, cuya imagen pública se conoce sobre todo de forma parcial, cuando no distorsionada por inevitables simplificaciones o alteraciones intencionadas”.
Monseñor Xuereb, que estuvo durante los primeros meses como secretario privado del Papa Francisco y posteriormente ocupó el cargo de delegado parar las comisiones organizativas de la estructura económica de la Santa Sede (COSEA) y del Instituto para las Obras de Religión (CIOR), y posteriormente fue nombrado Nuncio Apostólico en Corea y Mongolia, insistió que “entre los acontecimientos relatados en el libro se encuentran los intensos momentos de su renuncia, vividos con una admirable paz interior, fruto de su íntima unión de fe con Dios”.
"No fue una falta de valor"
En este sentido aclaró que “es mi deseo que la decisión de renunciar al papado aparezca bajo la luz adecuada. No fue, como se ha oído decir, una falta de valor. Fue, por el contrario, un acto de amor a la Iglesia. He experimentado de primera mano la audacia de esta decisión y puedo dar testimonio de ello. Soy consciente de que la mía es una pequeña contribución, pero tiene valor de autenticidad”.
El Nuncio del Papa en Marruecos espera “que el tono positivo y la atmósfera de serenidad que se desprenden de los relatos del libro, enriquecidos por un amplio aparato fotográfico, hagan agradable su lectura y lleven a imitar la humanidad, sencilla y rica a la vez, y las virtudes cristianas de Benedicto XVI. Su legado seguirá siendo precioso en el tiempo, y su pensamiento autorizado y nunca trivial continuará siendo una referencia segura para muchos”.
Compartir las conmovedoras historias de Benedicto
En otro momento, monseñor Xuereb confesó que “sentí que era mi deber compartir con el público en general las conmovedoras historias que tuve el privilegio de escuchar directamente de boca del Papa Benedicto en momentos de fraternidad. Pensé que los detalles de las conversaciones en la mesa en días ordinarios, las delicadas atenciones a las personas que le servían de cerca en diferentes momentos del día, la relación tan especial con su hermano, el ambiente de Nochebuena en la intimidad de la pequeña familia en el apartamento papal, así como las bromas ingeniosas, el amor por los animales, junto con las canciones y los recuerdos de infancia, podrían ayudar a descubrir mejor el perfil humano y espiritual de este gran hombre y a apreciar más profundamente sus cualidades como Pastor universal”.
Doctor de la Iglesia
Durante el turno del público asistente, una persona le preguntó si deseaba que Benedicto XVI fuera proclamado doctor de la Iglesia. Monseñor Xuereb respondió: “Deseo mucho que Benedicto XVI sea proclamado doctor de la Iglesia, ya que sus documentos, sus escritos, son punto de referencia en largo tiempo. Por lo tanto profundizando en sus enseñanzas no sería muy difícil encontrar el motivo por el que sea declarado doctor de la Iglesia”.
Otro momento destacado de su diálogo con los asistentes fue cuando señaló que “me siento huérfano desde el fallecimiento de Benedicto XVI pero la Providencia Divina me ha provisto un nuevo padre, el Papa Francisco”.
Lo que pensaba Benedicto XVI de España
Preguntado por lo que pensaba Benedicto XVI de España, y por el relato de la JMJ de Madrid 2011, el que fuera secretario segundo del Papa apuntó que “el Papa Benedicto tenía muchos amigos españoles, entre ellos el que era entonces arzobispo de Madrid, cardenal Rouco Varela. Cuando venía aquí a España se sentía como en familia”.
De la JMJ de Madrid recordó el momento de la tormenta en Cuatro Vientos o la procesión de las imágenes de Semana Santa por Colón. “Al Papa Benedicto le gustaban mucho estas devociones”, concluyó.