REFLEXIONES DESDE EL CORAZÓN

 

CANTABRIA NECESITA UNA COMUNICACIÓN DIRECTA CON EL VALLE DEL EBRO

 

 

Gervasio Portilla | 10.04.2019


 

El PNV se está convirtiendo en un peligro para la unidad de España y sobre todo para la igualdad de oportunidades entre las diferentes regiones.

Es un asunto que viene de tiempo atrás, desde la asunción por parte del Estado de un Estatuto como el del País Vasco lleno de privilegios y que cada vez se convierte, por merced de la ley electoral, en un problema mayor.

Al PNV le importa con perdón “un pimiento” España, sólo quiere debilitarla y seguir acumulando poder, eso si, sin llegar a la separación total, porque la “vaca dejaría de dar leche”.

Hay que cambiar la ley electoral, para que sólo con más de un tres por ciento del voto se pueda entrar en el Congreso y hay que hacer continua mención a que cada euro que se lleva de más el País Vasco, es en detrimento del resto de las regiones, principalmente las limítrofes.

Debemos ser conscientes, de que sólo desde una autonomía en las comunicaciones podremos competir, si no queremos someternos por la vía de los hechos a los intereses del País Vasco.

Cantabria, no necesita un tren con Bilbao como asunto preferencial, necesita mejorar las comunicaciones con la Meseta y abrirse al valle del Ebro de forma directa sin pasar por el País Vasco.

El acceso directo desde Colindres al valle del Ebro, sería la gran alternativa para la cornisa cantábrica, tanto para Galicia como para Asturias pues junto con Cantabria recortarían muchos kilómetros en la comunicación con el Valle del Ebro, quedando mucho más cerca Zaragoza y por consiguiente el Levante y Cataluña.

El puerto de Santander, ganaría competitividad en igualdad de condiciones.

No hace falta ser “un séneca” para darse cuenta que esta vía sería el gran proyecto de Cantabria, lo demás es ponerse en manos de los intereses vascos, los mismos que boicotearon el Santander-Mediterráneo, o es que hemos perdido la memoria.

 

Gervasio Portilla García,
Diácono permanente y periodista