MUNDO | Camerún - Nigeria

 

Emergencia en Nigeria: más de 35.000 personas huyen a pie hasta Camerún

 

Según informa Médicos Sin Fronteras el recrudecimiento de la violencia en Rann les ha hecho huir dejando atrás ancianos y familiares enfermos. Ahora se refugian en el gran campo de Goura, durmiendo al raso y casi sin nada que comer ni beber. Necesitan ayuda urgente.

 

 

15 febrero 2019, 15:07 | Sofía Lobos - Ciudad del Vaticano


 

 

Más de 35.000 nigerianos han cruzado a Camerún en las últimas semanas a causa del recrudecimiento de la violencia en los alrededores de Rann, en el noreste de Nigeria.

Han llegado al pueblo de Goura, en la zona noroeste de Camerún y necesitan con urgencia comida, alojamiento y agua, por lo que la Organización sin ánimo de lucro, Médicos Sin Fronteras (MSF) ha lanzado una respuesta de emergencia.

 

Huyendo a pie hacia Camerún

“Se fueron a pie en la madrugada; mujeres, niños y gente mayor”, afirma Silas Adamou Moussa, médico y coordinador de Emergencias explicando que  al huir tuvieron que dejar atrás a los ancianos y a los familiares enfermos. "Se llevaron todo lo que pudieron. El problema es que al llegar a Goura no tienen nada que beber y ningún sitio donde dormir. Han sido abandonados a su suerte”.

Los refugiados se han asentado en un gran campo en Goura. Desde finales de enero muchos duermen al raso, aunque es temporada de tormentas de arena y la temperatura desciende bruscamente por la noche.

Asimismo, el incremento de conflictos violentos ha hecho que el número de personas que llegan buscando refugio se incremente de manera considerable.

 

Enfermedades y falta de higiene

La incertidumbre sobre si serán realojados o si serán devueltos a Nigeria impide que la asistencia humanitaria sea tan completa y efectiva como debería ser.

 

“ Se fueron a pie en la madrugada; mujeres, niños y gente mayor. Se llevaron todo lo que pudieron. El problema es que al llegar a Goura no tienen nada que beber y ningún sitio donde dormir. Han sido abandonados a su suerte ”

 

Por ello, MSF, ha abierto una clínica en este campo donde el personal médico lleva ya realizadas más de 400 consultas: el 35% de los pacientes sufría enfermedades infecciosas respiratorias, seguidas de diarrea y conjuntivitis que derivan de la falta de higiene y de las pobres condiciones de vida a las que están sometidos.

 

El problema del acceso al agua

El acceso al agua potable es otro gran problema en esta zona por lo que la Organización ha incrementado progresivamente su provisión hidráulica hasta llegar a 240.000 litros al día.

Esta cantidad equivale a siete litros por persona y por día, un porcentaje muy por debajo del estándar mínimo de 15 litros de agua necesarios para emergencias.

 

“ Los refugiados se han asentado en un gran campo en Goura. Desde finales de enero muchos duermen al raso, aunque es temporada de tormentas de arena y la temperatura desciende bruscamente por la noche ”

 

En este contexto, el Doctor Moussa asegura que no es una novedad que la gente de Rann huya hacia Camerún.

“La primera vez algunos volvieron a casa tras huir, pero esta vez no. No quieren volver a Rann a no ser que sepan que podrán vivir con seguridad, y su futuro es incierto. Tienen miedo. Sus hijos tienen miedo”, concluye el coordinador de MSF recordando que, como siempre, los niños son los grandes perjudicados en este tipo de historias, ya que representan las futuras generaciones del país que lamentablemente están creciendo en un ambiente de injusticia, pobreza e inestabilidad que traerá graves consecuencias para toda la nación.