Diócesis
El 85% de los asistentes al encuentro de Taizé serán acogidos por familias madrileñas
11.000 de los casi 13.000 inscritos han encontrado alojamiento en las viviendas de los voluntarios de Madrid
27/12/18
La comunidad Taizé celebra su 41º encuentro europeo de jóvenes en Madrid entre el 28 de diciembre y el 1 de enero.
Las fuentes consultadas por Religión Confidencial aseguran que la cifra de inscritos es de 13.000, procedentes de ocho países de Europa: Polonia, Ucrania, Croacia, Francia, Italia, Alemania, Portugal y España.
También se prevé la participación de inscritos de otros países e incluso de otros continentes.
De ellos, la mayoría, 11.000, han sido acogidos por voluntarios madrileños que les han ofrecido sus viviendas para pernoctar los cinco días que dure el encuentro, según ha sabido RC de las mismas fuentes.
El resto serán acogidos por 150 parroquias de la capital.
1.000 voluntarios
Desde el miércoles, 1.000 personas participan como voluntarias para las tareas logísticas.
De ellas, 60 están encargadas de la logística de la comida y 200 de su distribución. Se repartirán, según ha informado la propia comunidad Taizé, 45.000 raciones de comida caliente, 7,5 toneladas de pan y 95.000 mandarinas, entre otros productos.
Oración nocturna en IFEMA
Los jóvenes de Taizé tendrán tres momentos de oración diarios, por la mañana, a mediodía y por la noche.
Los dos primeros tendrán lugar en las parroquias asignadas, todas en el centro de Madrid: la Catedral de la Almudena, San Francisco el Grande, Santa Teresa y San José, San Isidro, la Basílica de San Miguel, San Cayetano, San Ginés de Arlés, Santa Cruz, Nuestra Señora del Carmen, San Andrés y San Sebastián.
El tercero, el nocturno, se desarrollará en el pabellón 4 de IFEMA. La oración es uno de los pilares fundamentales de la comunidad.
El programa también incluye actividades solidarias (distribución de chocolate caliente por la ciudad) y talleres sobre la vida cristiana: la confesión, la fraternidad, la vocación, etc.
El día 31 está prevista una vigilia por la paz y una pequeña fiesta, en la que los jóvenes llevarán a cabo alguna representación típica de su país de origen.