VATICANO | mujeres - Africa
Juezas Africanas: Pobreza y tráfico de personas
La Academia Pontificia de Ciencias promovió una "Cumbre de Mujeres Jueces Africanas sobre Trata de Seres Humanos y Crimen Organizado”. El tema central es la trata y la esclavitud moderna en el continente africano
14 diciembre 2018, 10:52 | Ciudad del Vaticano
Cerca de cincuenta mujeres se han reunido en la Academia Pontificia de Ciencias del Vaticano para compartir problemas, conocimientos, experiencias y buenas prácticas. Ellas esperan que sus voces sean escuchadas. Esta cumbre es la continuación de un evento similar realizado en 2017, con un enfoque particular en los problemas específicos del continente africano, ya que, señalan las jueces, un alto porcentaje de las víctimas de la trata proviene de África.
El Papa Francisco es un incansable luchador contra el fenómeno de la trata y la esclavitud moderna, describiéndolo como un crimen contra la humanidad y un resultado de la globalización de la indiferencia.
Las juezas de Nigeria, Cecilia Olatoregun y Anwuri Chikere, hablaron con la periodista Linda Bordoni sobre la importancia del evento y de su llamamiento a los líderes mundiales para que liberen a África de la explotación postcolonial.
La Jueza Olatoregun, de la Corte Suprema Federal de Nigeria, expresó su creencia de que la Cumbre ha proporcionado una importante ocasión para que los jueces africanos se reúnan "porque estamos involucrados en la resolución del problema de la trata de personas y de la esclavitud moderna".
Señaló que se trata de una realidad prevalentemente africana en la que se trafica con personas hacia Europa y las Américas. Su propio país, Nigeria, dijo, es la base de muchas redes criminales que comercian personas con fines de prostitución y otros delitos.
La Cumbre llega en el momento oportuno
"Esta cumbre llega en un momento muy oportuno para que nuestros dirigentes y legisladores de toda África (...) reflexionen más a fondo sobre las soluciones para la trata de personas en diversos sectores de la jurisdicción penal", dijo.
La jueza Olatoregun mencionó los flagelos de la prostitución, el trabajo forzado, la recolección de órganos, el trabajo infantil y el reclutamiento de niños soldados, y dijo: "Es un buen momento para hablar de todo esto". "Aquí estamos hablando de lo que sucede en los diferentes países, estamos comparando notas y soluciones, compartiendo soluciones y apuntando a la acción conjunta", dijo.
El juez Chikere, del Tribunal Superior Federal de Abuja, señaló que los participantes en la Cumbre coincidieron en que "nuestros amos coloniales nos han liberado políticamente, pero no económicamente".
"Estamos aquí reunidos, dijo, para compartir ideas sobre cómo liberarnos económicamente para poder erradicar los problemas que tenemos". Señaló que es historia que los africanos eran vendidos como esclavos, pero dijo: "¡sigue siendo así! ¿Qué es la trata de personas? ¡Esclavitud!"
La jueza Chikere dijo que la extracción de órganos humanos sólo puede ocurrir debido a los problemas económicos que tienen los estados africanos: "Ahora están vendiendo a sus semejantes para satisfacer sus demandas económicas".
El precio del colonialismo
Dijo que sólo en la superficie las potencias mundiales han liberado a las naciones africanas del colonialismo; en realidad, explicó, todavía nos controlan y hacen imposible que seamos económicamente autosuficientes.
"Ellos controlan y apoyan a nuestros líderes en la forma en que se comportan, pero nosotros, los ciudadanos, somos los que estamos peor por ello", dijo.
Papa Francisco
La jueza Chikere está de acuerdo con la definición del Papa Francisco de la trata de personas como una "herida en el costado de la humanidad" y dice que esto es especialmente cierto en África.
"La mayoría de los participantes aquí son de países africanos", señaló y dijo que han pedido al Obispo Marcelo Sorondo, Canciller de la Academia Pontificia de las Ciencias, que hable con el Papa y le pida que hable con los líderes africanos.
"Deben liberar económicamente a los africanos, porque cuando estás económicamente estable, nadie puede empujarte. Si tienes dinero en el bolsillo y puedes comprar lo que necesitas, no pensarás en maneras malvadas de hacer dinero", dijo.
Concluyó expresando su esperanza en el futuro: "¡Rezaremos a Dios para que logremos nuestro objetivo al venir aquí!".