Red Iberoamericana de

Estudio de las Sectas

 

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Nº 610

15 de sep. 2018

 

BOLETÍN MONOGRÁFICO: PSEUDOTERAPIAS Y PSEUDOCIENCIAS

 

1. La ex ministra española de Sanidad preparaba una estrategia contra las pseudociencias.

2. Los médicos de Alicante proponen un plan para combatir eventos pseudocientíficos.

3. Francia: la Universidad de Lille suspende el diploma de homeopatía.

4. Los farmacéuticos de Madrid continúan ofreciendo formación en aromaterapia.

5. Alertan en España sobre la Técnica de Desprogramación Medular.

6. El naturista que hizo dejar el tratamiento a una enferma de cáncer: “tienes que sufrir para curarte”.

7. Científico mexicano denuncia su utilización fraudulenta por parte de una secta pseudocientífica.

8. La Nueva Medicina Germánica: una teoría delirante y peligrosa.

9. La Biodescodificación: toda enfermedad tiene orígenes emocionales.

10. La Bioneuroemoción: una lista de afectados tan larga como cruel.

 

 

1. La ex ministra española de Sanidad preparaba una estrategia contra las pseudociencias.

FUENTE: Diario Médico

 

 

Carmen Montón, ministra de Sanidad española antes de su dimisión, presentada el pasado 11 de septiembre, anunciaba unos días antes en una entrevista con Diario Médico planes a corto plazo para sustentar su postura contra las pseudoterapias: una estrategia general Stop Pseudociencias, “poner en orden el mercado de productos homeopáticos” y emprender una regulación contra la publicidad engañosa. Recogemos lo relativo a estos temas en la entrevista realizada por José A. Plaza y Laura G. Ibañes.

- Ha sido dura en su discurso contra las pseudociencias y la homeopatía. ¿Habrá novedades legislativas pronto?

- El próximo lunes día 10 me reuniré con el comisario europeo de Salud, Vytenis Andriukaitis, como primer paso para tratar de que Europa cambie de posición con la homeopatía y deje de considerar estos productos como medicamentos. La UE marca el encuadre general, pero vive un cambio de tendencia. Francia y Reino Unido ya dan pasos contra la homeopatía. Tengo esperanza de que en Europa haya recorrido para dejar de considerarla como medicamento.

- Mientras se debate con Europa, ¿qué puede hacer España?

- Vamos a controlar el mercado y a impedir que se pueda vender nada que no esté autorizado. Hay que ordenar el mercado: no sabemos cuántos o cuáles son los productos que se están vendiendo. Estamos planificando una estrategia general de Stop Pseudociencias. Dialogaremos con todos los agentes, cuando esté más avanzada para que formen parte de la estrategia. No sólo se trata de gestión sanitaria, sino de ética profesional y política.

- Cuestión de ética profesional y política… ¿Cree que ha sido demasiado tibia la postura tradicional de los colegios de médicos sobre la homeopatía?

- No la voy a calificar, pero hay desigualdad en las manifestaciones de unas provincias frente a otras. La Organización Médica Colegial me ha dicho que hará el debido acompañamiento para sacar de la clínica las terapias sin rigor científico.

- ¿Cómo avanza la revisión de productos homeopáticos que inició el anterior Gobierno?

- Ha terminado el plazo para que las empresas manifiesten qué y cómo quieren comercializar. Ahora hay que analizar estas peticiones. No se venderá nada que no esté autorizado y se establecerán las sanciones oportunas.

- Si la homeopatía deja de considerarse medicamento, ¿saldrá de las farmacias?

- Tendrá un tratamiento distinto, es evidente.

- ¿Se irá más allá de la homeopatía?

- Revisaremos toda la legislación que tenga que ver con publicidad engañosa. Queremos dar mejor información a la ciudadanía, veraz y rigurosa, para que no confunda un producto o práctica que no cura con lo que ha demostrado utilidad y eficacia.

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2. Los médicos de Alicante proponen un plan para combatir eventos pseudocientíficos.

FUENTE: Redacción Médica

 

 

La presidenta del Colegio de Médicos de Alicante (COMA), Mª Isabel Moya, ha planteado a la consejera de Sanidad, Ana Barceló, la elaboración de un plan preventivo para evitar que en la Comunidad Valenciana puedan realizarse eventos médicos y sanitarios que carezcan del aval de fundaciones científicas, las administraciones y los Colegios Profesionales. Lo cuenta el medio especializado Redacción Médica.

Así se lo trasladó la presidenta de los médicos alicantinos a la titular de Sanidad en una reciente reunión, donde expuso los peligros que suponen para la población estas prácticas no avaladas por evidencias científicas dado que muchas de ellas ponen en riesgo la salud de los ciudadanos que se someten a ellas, interrumpan o no su tratamiento convencional.

Sin ir más lejos, el pasado mes de junio, el COMA frustró la celebración de un seminario del falso doctor Andreas Kalcker, que pretendía divulgar los “beneficios” de un producto que no es sino lejía industrial diluida al 28 por ciento y mezclada con ácido cítrico. Ahora, según confiesan desde la organización colegial, el punto de mira está en el I Congreso de Salud y Medicina Integrativa a celebrar en noviembre, organizado por la Sociedad Española de Salud y Medicina Integrativa, también en Alicante.

Preocupación institucional

Moya entiende la dificultad de impedir la realización de dicho congreso al organizarlo una sociedad legalmente constituida y de la que forman parte médicos, enfermeros y otros profesionales sanitarios. Pero es precisamente la participación de profesionales de la Medicina lo que preocupa a la presidenta alicantina dado que, formados en la evidencia científica, estos médicos dan cabida en su trabajo a prácticas alternativas, a la pseudomedicina.

Especial problema plantea la situación de enfermos oncológicos quienes, en ocasiones, han abandonado sus tratamientos en la confianza que les ofrecen estas pseudoterapias alternativas, situaciones que ya han sido denunciadas por la Sociedad Española de Oncología Médica y con la que el COMA coincide en su oposición a las pseudoterapias, los pseudotratamientos y los “productos milagro”.

Así, y pese a la necesidad de mantener activas campañas formativas, informativas y divulgativas a la población sobre los peligros de estos “tratamientos”, el COMA entiende que hay que ir un paso más allá y comenzar a tomar medidas que con las que, de manera rotunda, se manifiesten de forma explícita la oposición de instituciones profesionales, de administraciones públicas y sociedades científicas hacia las pseudociencias.

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3. Francia: la Universidad de Lille suspende el diploma de homeopatía.

FUENTE: Varios medios

 

 

La guerra de la homeopatía que comienza a despuntar en Francia se ha cobrado su primera víctima: el diploma de Homeopatía de la Facultad de Medicina de Lille. El decano anunció el pasado 31 de agosto que la Facultad suspendería esta disciplina para el curso 2018/2019 “hasta que se aclare la posición de la Alta Autoridad de la Salud y se produzca un debate nacional sobre la regulación de esta práctica”. Lo cuenta Rafael Cereceda en Euronews.

En declaraciones a la TV pública, el decano Didier Gosset explicó que la homeopatía es una doctrina sin pruebas científicas y que eso no es lo que promueve la Medicina. Asegura que la suspensión del título es fruto de “una reflexión científica y pedagógica”. La repentina decisión, a días del comienzo del curso escolar, se produce después del vivo debate que ha provocado una carta publicada por el diario Le Figaro en marzo pasado en la que 124 médicos invocaban el juramento hipocrático para cargar contra homeopatía y en general las “llamadas terapias alternativas”.

La guerra está abierta en las instituciones sanitarias francesas. Organismos como el Colegio Nacional de Profesores Médicos de Cabecera apoyan a la Universidad de Lille y llaman a otras a seguir el ejemplo. En junio el consejo de la Orden de los Médicos ya se posicionó tomando distancias frente a la homeopatía y las medicinas alternativas, que “son una fuente de confusión y litigios de interpretación”.

En el otro bando, el sindicato de homeópatas ha publicado un comunicado en el que denuncia una “caza de brujas” que “da la espalda a la práctica de una medicina integrativa y reconciliada”. El sindicato lamenta “una decisión anunciada por un tuit, cuando este diploma existe desde hace una treintena de años”. Y “toma nota” de que los responsables y profesores del diploma no han sido consultados ni siquiera informados.

El sindicato ha denunciado a los 124 médicos que publicaron la carta de la discordia con no respetar la fraternidad ni el código deontológico. Los homeópatas lamentan sobre todo la rapidez con la que se ha decidido acabar con un diploma que se ofrecía desde hace tres décadas en la Universidad de Lille. El vicepresidente del sindicato declaraba a la radio Franceinfo que en su opinión era una disciplina “racional” y dentro de las normas del ejercicio médico” (...) “como una técnica, una terapia complementaria”. El sindicato defiende que se evalúe la homeopatía aunque no con los mismos baremos que la medicina química “hay una complementariedad y las bases científicas deben adaptarse a nuestro modelo”.

La Seguridad Social francesa rembolsa el 30 % de los medicamentos homeopáticos recetados por un médico. Francia es sede del mayor laboratorio de productos homeopáticos del mundo, Boiron. El 3 de septiembre las acciones del laboratorio, con una cifra de negocio de 614 millones de euros caían ligeramente. Ahora le tocará decidir a la Alta Autoridad de la Salud. Su veredicto está previsto en febrero de 2019.

Adiós al “santuario” homeopático francés

Por su parte, Javier Armentia ha escrito en el medio Noticias de Navarra que la Universidad de Lille expulsa a la homeopatía de su facultad de medicina a la espera de una resolución oficial de la autoridad nacional sobre esta práctica pseudocientífica que se prevé definitiva y negativa, reclamando que se deje de gastar dinero público en algo que no funciona como medicamento y que un creciente número de estudios científicos vincula, junto con otras prácticas pseudocientíficas mal denominadas alternativas, a mayor mortalidad. Personas que podrían curarse con la medicina de verdad, esa que los homeópatas llaman halopática y a la que acusan de ser un montaje o conspiración. En Francia el estado reembolsa el gasto farmacéutico homeopático: más de 600 millones de euros anuales, un 1,4 % del gasto total en medicamento.

La situación en España, que afortunadamente nunca cedió a las presiones para incluir homeopatía dentro de la cartera básica sanitaria (aunque con algunos gobiernos casi lo consiguen), se ha ido poniendo más clara en los últimos años, con un rechazo creciente por parte de universidades, colegios y asociaciones profesionales de medicina y farmacia, y a pesar de la inversión en propaganda y publicidad de las empresas vendedoras. Varios ministros del nuevo Gobierno han sido claros en reclamar que se deje de promocionar esta práctica engañosa.

En el Reino Unido también se está acabando la impunidad para esta antigua receta tan falsa como dañina: el año pasado el organismo público de salud recomendó que se eliminara de la práctica médica, aunque el tema está en los juzgados. Queda Alemania, cuna del creador, Samuel Hahnemann, pero sería deseable que ya en todo el territorio europeo (y en el resto del mundo) se dejara de promocionar una terapia tan falsa como absurda. El santuario homeopático se diluye, y ojalá se extinga como otras prácticas antiguas y erróneas.

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4. Los farmacéuticos de Madrid continúan ofreciendo formación en aromaterapia.

FUENTE: Redacción Médica

 

 

Tras las vacaciones de verano, la agenda del Colegio de Farmacéuticos de Madrid se retoma y, al parecer, también su formación en pseudociencias. En esta ocasión, el organismo ofrece la segunda parte de su curso de aromaterapia científica. Esta disciplina ha sido tachada por los científicos como pseudoterapia, pues no se ha demostrado que tenga ninguna evidencia científica más allá del efecto placebo. Lo leemos en Redacción Médica.

Ya en octubre celebró un curso sobre aromaterapia. Una actividad que contó con la colaboración del laboratorio Pranarom, especializado en la venta de aceites esenciales con los que se realiza esta pseudoterapia. En este caso, la vocalía de Plantas Medicinales del Colegio fue la que la organizó con el objetivo de “profundizar en las bases de la aromaterapia científica, aplicar los aceites esenciales y saber usarlos según la patología”.

Ahora llega la segunda parte de este curso: aceites esenciales terapéuticos durante el embarazo y la lactancia. Será los días 6 y 13 de noviembre de este año, tiene un precio de 40 euros –30 si es un colegiado–, es presencial y su aforo está limitado a 35 plazas. Recomendaciones generales para la mujer embarazada, familias bioquímicas y aceites esenciales desaconsejados, aceites esenciales de uso seguro, patologías, parto y lactancia, son los temas que se abordarán durante las jornadas, todo ello en base a la aromaterapia, sin evidencia científica.

Por su parte, el Grupo de Investigación en Comunicación Científica (GRECC) ha lanzado una advertencia sobre la práctica de este tipo de ‘terapias’. “Se ha demostrado que algunos aceites esenciales poseen propiedades bactericidas, sedantes o antiinflamatorias. A pesar de esto no hay estudios clínicos que demuestren la total eficacia de la aromaterapia más allá del efecto placebo”, alerta en su página web.

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5. Alertan en España sobre la Técnica de Desprogramación Medular.

FUENTE: RedUNE

 

 

Los blogs de la asociación española de prevención del sectarismo y abuso de debilidad RedUNE han publicado unas informaciones sobre la Técnica de Desprogramación, que recogemos a continuación. La primera parte está escrita por su presidente, Juantxo Domínguez, enfermero de Urgencias y master en Educación para la Salud y Consejo Clínico. La segunda parte está a cargo de María Eugenia Ibáñez, que denuncia una situación cercana.

¿De qué se trata?

Se presenta como Experta en medicina holística, osteopatía, kinesiología y Medicina Tradicional China, se ha inventado una pseudo Técnica de Desprogramación Medular, de la que también imparte en cursos y talleres de formación. Su frase dilapidaría y que resumen toda su teoría y práctica es: “La enfermedad es la respuesta a un programa equivocado”. Con dicho método afirma conseguir reordenar a todos los niveles al ser humano con el objetivo de llegar hasta las raíces más profundas de un programa en el que está atrapado y es causa de dolor, enfermedad o bloqueos.

Siguiendo las teorías más peregrinas de las terapias de Nueva Era, cada estructura del sistema, órgano, víscera, huesos, músculos, etc., tienen un lugar preciso dentro del espacio. Cuando estos elementos se salen de su punto de encaje correcto, dejan de ocupar su lugar, también dejan de funcionar de la forma correcta, siendo la razón de desequilibrios y enfermedades en todos los planos, físico, químico, emocional, energético.

Difunde la teoría cada vez más extendida entre los pseudoterapeutas de que nuestras enfermedades están generadas por bloqueos o desajustes emocionales. Y que para ello hay que atacar nuestras relaciones naturales básicas. Es decir nuestra familia y amistades. Con este proceder se manipula descaradamente a personas vulnerables y con poca autoestima. Se consigue tener adeptas a sus innumerables y costosos cursos, sin recibo justificatorio de los talleres. Y de paso se genera una dependencia intermitente semana a semana, que ella se encarga de irte Programando, para beneficio económico propio.

Son diversas las circunstancias que operan para que cualquier persona por encima de su mayoría de edad, nivel cultural o profesional, caiga en estas trampas endemoniadas que pueden provocar problemas psíquicos irreparables. Muchas veces es la no superación de problemas de rechazo, de no reconocimiento, y duelos no resueltos de familiares o amistades. Aunque el interés por descubrir cosas nuevas sin prevenciones previas, también tiene su factor determinante en otras personas.

Siguiendo la pauta de las denominada “doulas”, desde la Técnica de Desprogramación Medular se atreven con un protocolo especial para los que han de venir, tratando a sus madres desde el principio de la concepción, acompañándolas en el embarazo y disponiéndolas a un parto natural, sin traumas, para que sus hijos desde el inicio tengan capacidad y herramientas para disfrutar de la vida. Esto se llama, en “roman paladino”, intrusismo profesional en la especialidad de materno infantil, más conocidas como matronas.

Las instituciones pertinentes de Sanidad, así como los Colegios profesionales sanitarios, deben ponerse las pilas, para atajar tanto desmán generador de falsas expectativas de resolución de enfermedades, por métodos esotéricos, sin evidencia científica. Es menester, sin más dilaciones, la protección de los consumidores, regulando la apertura y difusión de estas actividades que perjudican seriamente la Salud de las personas. Aunque voluntariamente acuden a las mismas.

Lo mismo que los talleres de coches, están regulados por normativas y certificados homologados en cualquier lugar del país. En este mismo sentido es muy importante certificado oficial de buenas prácticas sanitarias y de evidencia científica de dichos métodos. Pues se promueve una actividad abierta a la comunidad en la cual siempre existirán sujetos vulnerables, que les pueda perjudicar estos procedimientos de seguir los dictados de no profesionales de la salud, reconocidos por entidades oficiales. Dejando muchas veces medicaciones adecuadas a sus dolencias. Y en otros casos llevando prácticas psicológicas no reconocidas, con el consiguiente daño psíquico derivado del abuso de debilidad. La charlatanería no puede estar amparada, por la inhibición de responsabilidades propias de las instituciones, a las cuales sustentamos con impuestos públicos.

Una denuncia clara

Hoy en día, dentro de las agrupaciones sectarias, existen muchas que son de estructura menos rígida, más “light”, más volubles, más permeables en la forma de entrar y también de salir. Hablamos de los grupos, talleres, y agrupaciones de la Nueva Era. En ellas las personas entran y salen, dejan un grupo, dejan un curandero o líder, y van a otros; de manera más fácil a como en las sectas más organizadas. Van perdiendo el dinero de lugar en lugar y aumentando sus frustraciones de curso en curso y de taller en taller con propuestas pseudo-espirituales, mágicas y de sanación imposibles.

Hoy quiero denunciar uno de estos grupos cuya líder o curandera se llama Ana García, vive en Madrid y anunciándose en diferentes medios por Internet ha conseguido captar a muchas personas que estando en una constante búsqueda o con problemas de salud caen con facilidad en sus redes y así forman una de estas sectas modernas.

Su discurso para solucionar los problemas de todas las personas que llegan a ella es que ya naces con ellos, “todos los males físicos o espirituales que se tienen en la vida”, como ella dice “vienen de fábrica” y para acabar con estos problemas, ella te propone la “Técnica de desprogramación medular” de tu cuerpo. Técnica de su propia cosecha sin evidencia científica ni homologación alguna. Pura charlatanería.

Con esta “desprogramación medular” pretende curar todas las enfermedades físicas y mentales, incluso el cáncer, para hacerlo te cita en unas sesiones que te cuestan 100 euros donde tienes que tumbarte en una camilla y ella te toca con una especie de madera y sus manos la parte que tienes enferma y con eso dice que te limpia esa zona donde tienes el mal de todos los virus, hongos o bacterias que están produciendo tu problema.

Para crear un ambiente de grupo, realiza unos talleres de fin de semana en el centro Sigma Vitalis, que está en la Calle Caramuel, 38 Local 7 de Madrid, que cuestan 200 euros cada uno, donde reúne a un grupo de personas que tienen los mismos problemas o parecidos, con estos talleres fortalece el vínculo de unión entre todos los participantes de este grupo de riesgo para la salud.

Para que esta “desprogramación medular” de tu cuerpo sea efectiva, ya que las personas que llegan a ella con el paso del tiempo no se curan y las desequilibra todavía más, entonces ella les aconseja lo mismo que la mayoría de todas las sectas tradicionales y es que tienes que romper con todo lo que te une a tu pasado , es decir con todos tus amigos y familiares que según ella son los que te han transmitido sus frustraciones y sus males y por supuesto son los culpables de todo lo que te está pasando y con esto consigue que todos tus lazos afectivos que ella te pueda manipular completamente.

Con el paso del tiempo para las personas que forman parte de este GrupoDependiente relacionado con la salud y el bienestar, se convierte en un lugar que impide, en mayor o menor medida, seguir los parámetros que hoy día seguimos los miembros que formamos esta sociedad y es acudir al médico o al psicólogo si tienes problemas tanto físicos o mentales.

Ya que una de las teorías de la “Técnica de la desprogramación medular” es que lo que falla es el sistema, todas las personas cuando nacemos venimos “programadas” y por eso las personas que acuden a ella, necesitan encontrar su lugar en el mundo. Para cambiar esto, lo que hay que hacer es una “desprogramación” de tu cuerpo.

A través de este proceder manipulativo y de abuso de tu debilidad lo que consigue es el control de tus sentimientos, comportamientos y pensamientos muy sutilmente, mediante anulación del sentido crítico y presión psicológica; quedas abducida de que el exterior es malo y el interior (el grupo) es bueno; que sólo ellos están en la posesión de la verdad y serán salvados; que Ana García, tu “maestra terapéutica”, es quien conoce los destinos y que sólo ella es capaz de dar respuesta a todas tus preguntas .

Esta terapeuta (así se presenta) no tiene ningún escrúpulo en aconsejar a los que acuden a sus talleres, diversos comportamientos de forma coercitiva. Es muy gráfico que mayoritariamente son mujeres las participantes en sus Terapias, que realizan igualmente publicidad entre sus allegadas. Así fue como captaron a mi mejor amiga y he visto y compartido el sufrimiento de sus padres y familiares más cercanos, sin poder hacer mucho por ella, ya que ella ve a esta líder, Ana García, con poderes extraordinarios.

Tampoco ha hecho caso de los consejos de amigas comunes. Estamos perdiendo a una buena amiga, pues le aconsejan reiteradamente alejarse de su familia y de nosotras. Ella sigue acudiendo a estas terapias y cada vez la observamos más perdida y desequilibrada. El motivo de mi denuncia hoy, con esta carta es alertar a personas que están en este camino de búsqueda interior constante o con problemas de salud, que no caigan en las redes de esta “Terapia de Desprogramación Medular”, con los consiguientes daños físicos y psicológicos que está originando en muchas personas, sin ningún control sanitario.

Diversas afectadas queremos ayudar a otras familias, para poder evitar males mayores. Que no sólo pretende despojarnos de nuestro dinero, sabiendo que no todo ello tributa a la hacienda pública, sino de lo que es más importante en la vida: el afecto y cariño de nuestros seres queridos.

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6. El naturista que hizo dejar el tratamiento a una enferma de cáncer: “tienes que sufrir para curarte”.

FUENTE: El Español

 

 

Cristina Beraza tenía 51 años cuando se notó lo que ella pensó que era una hemorroide. La mujer, residente en Hondarribia (Guipúzcoa), donde trabajaba en una tahona –el negocio familiar–, fue primero a la farmacia, donde le prescribieron una crema contra las almorranas. Pero aquella protuberancia no se reducía, lo que le llevó a acudir al médico. Tras muchas pruebas, llegó un diagnóstico que, si bien asusta, no tendría por qué haber sido mortal. Cristina padecía un cáncer de ano que, según la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) tiene una supervivencia a cinco años superior al 50 % en estadios avanzados. Lo cuenta Ainhoa Iriberri en El Español.

Ella no pertenece a ese 50 % y, de hecho, falleció dos años después del diagnóstico. Pero no fue precisamente porque el tratamiento fracasara, sino porque un hombre se cruzó en su camino. Su nombre, Juan José García Román; su profesión: naturista. Ahora este pseudocientífico está denunciado por estafa y la familia de Cristina le reclama 15.000 euros, lo que calculan que gastaron en terapias naturales y en consultas en las que el curandero le decía que no tenía cáncer.

Una visita fatídica

Lo cuenta a El Español su hija, Elena Pérez Beraza, que insiste en que el dinero les da igual y en que lo único que persiguen es que la historia de su madre no se vuelva a repetir. Le consta que meses después de la muerte de ésta, García Román seguía atendiendo pacientes en Hondarribia y que lo hacía en la misma herboristería –Txuntxumela, en la calle Santiago– donde su madre tuvo la desgracia de entrar unos meses después de ser diagnosticada de cáncer.

El establecimiento, cercano a su casa, está regentado por una mujer llamada Juncal. Allí acudió Cristina en busca de un laxante más suave de los que le habían recetado en el hospital, pocos meses después de empezar con el tratamiento de quimioterapia. “Le dijeron que si le operaban tendría que llevar bolsa [colostomía, una procedimiento que deriva las heces al exterior] toda su vida y optó por la quimioterapia”, recuerda. El tratamiento no le sentó “nada bien”. “Estaba muy débil”, recuerda su hija. En esas circunstancias, no es de extrañar que prestara atención a Juncal cuando le habló de un naturista de Córdoba –en realidad, la sede social de su negocio está en Priego del Río– que había curado “multitud de cánceres”.

La mujer –a la que la policía también está investigando– le proporcionó el teléfono y Cristina le llamó. Acudió a la primera consulta –a 120 euros– en un piso que el naturópata tenía alquilado en la localidad vasca, adonde se desplazaba regularmente. Fue con su hermana y nada más salir de ahí ya tenía la decisión tomada. “Optó por dejar la quimio, porque él le dijo que si seguía con ella estaría en una caja de pino en un mes”, recuerda Elena. En Osakidetza (el servicio vasco de salud) no lo entendieron. “Durante la primera semana, la bombardeaban a llamadas, pero él –el naturista– estaba muy encima, le decía qué les tenía que decir para que la dejaran en paz, cómo tenía que responder a esas llamadas”, rememora su hija.

Confianza ciega

Hubo voces críticas en la familia. Su madre y sus hermanos fueron a hablar con Juncal para preguntarles si el terapeuta era “de fiar” y ella les confirmó que sí, que eran muchos los casos que había curado. Tampoco su marido veía con buenos ojos la idea, pero acabó asumiéndolo. “¡Se la veía tan convencida!”, apunta su hija. Elena reconoce que a ella también le convenció, que tenía esa forma de contar historias –siempre casos de éxito– que hacía confiar y que hizo que esa confianza se mantuviera incluso cuando pasaron los meses y Cristina en vez de mejorar empeoraba.

El tratamiento consistía en una dieta muy restrictiva –“le dejaba comer cuatros cosas”– y varios productos: “polvos, unas bolas y unos líquidos”. El precio, alrededor de 200 euros, que se sumaban a las consultas. Éstas empezaron a espaciarse misteriosamente cuando Cristina comenzó a empeorar, pero se prolongaron mucho tiempo. Al principio, en las casas alquiladas de García Román; después, en la herboristería –una de cuyas empleadas ha asegurado a El Correo que ya no trabajan con el presunto estafador– y, cuando la paciente empezó a estar muy débil, en su propia casa. “En cuanto hablábamos con él, tanto mi madre como yo nos quedábamos contentas”, reconoce Elena.

Pero llegó un momento en que Cristina apenas podía moverse de la cama y el naturista dejó misteriosamente de cogerles el teléfono. Hasta que llamaron desde otro número y cogió. A pesar de la situación que le describieron, su mensaje siguió siendo similar: el cáncer hacía tiempo que había desaparecido del organismo de su paciente.

Hubo un momento en que la situación se volvió insostenible. Cristina tenía tan hinchadas las piernas que no se podía mover, afectada además por grandes dolores. “El naturista no le dejaba tomar ni un ibuprofeno, decía que le haría daño al hígado y que, además, para superar un cáncer tenía que sufrir. Los médicos nos dijeron que ni los animales habrían sufrido así”, cuenta su hija.

Regreso a la medicina convencional

Cuando los médicos llegaron a su casa y le hicieron a su madre las necesarias pruebas de diagnóstico por imagen vieron que el cáncer estaba totalmente extendido y que no había nada que hacer. “Fue al hospital y ya no salió, tardó un mes y medio en fallecer”. En ese tiempo, Cristina se dio cuenta de lo que había pasado y dijo a su familia que el naturista “le había comido la cabeza, que tenía que ir a la cárcel”.

Sin embargo, los Pérez Beraza no denunciaron inmediatamente después del óbito –en julio de 2017–, sino algunos meses después, cuando se enteraron de que el terapeuta –consciente de la muerte de su madre– seguía pasando consulta en la herboristería. Allí fueron a la comisaria y montaron toda una trama para pillar a García Román con las manos en la masa. “Una amiga de mi madre llamó para pedir hora y cuando ya supimos que estaba en el pueblo, la ertzaintza fue a preguntar por él, aunque no le detuvo todavía”, cuenta Elena.

Una historia de película

La detención tenía que tener lugar al día siguiente, porque querían cogerle in situ. Para ello, la amiga de Cristina llevaba una grabadora y unos billetes marcados, que demostrarían que tanto la herboristería como el naturista habían aceptado dinero por prometer una cura falsa. Pero la visita anterior de los policías pusieron sobre aviso al cordobés. “Ese mismo día, la llamaron para decirle que el naturista no podía verla, que le habían surgido problemas familiares”, relata Elena.

Pero ahí no concluyó la persecución. La hija de Cristina contó a las fuerzas de seguridad en qué dos hoteles se solía alojar el naturista y conminaron a los establecimientos a avisarles cuando éste dejara el alojamiento. “Nos lo dijeron y la ertzaintza le confiscó el ordenador, donde apuntaba muchas cosas”, cuenta Elena.

Todo esto sucedió en noviembre y la policía dijo a la familia que esperaban que el caso estuviera resuelto en “alrededor de un año”. “Hay muchos casos como éste”, cuenta Elena que les dijeron. Ella y su hermano fueron a declarar, pero no tuvieron la oportunidad de ver la cara del naturista. Fue su abogado y el de la dueña de la herboristería, que se mostró impresionado ante su declaración. “No paraba de resoplar con las cosas que contábamos”, comenta la hija de la víctima. Elena, que reconoce haber recibido muchísimas muestras de apoyo –“sobre todo de la gente del trabajo”–, tiene claro qué le diría a alguien que se viera en la misma situación de su madre. “Que no lo haga, que la medicina alternativa sola no cura”, concluye.

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7. Científico mexicano denuncia su utilización fraudulenta por parte de una secta pseudocientífica.

FUENTE: Crónica

 

 

Con el título “Energía cósmica, sanación y fraude”, el medio mexicano Crónica ha publicado un artículo firmado por Gerardo Herrera Corral, que reproducimos a continuación. El autor es físico e investigador del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV).

Hace ya varios años que algunos colegas investigadores me alertaron sobre la circulación en Italia de un video seudocientífico en el que aparezco. El mismo video fue después traducido al español y aún se le puede ver en YouTube. Ahí se expone un nuevo método de sanación que hace uso de técnicas poco convencionales para curar cualquier mal. En él aparezco yo, fuera de contexto, explicando la existencia de la radiación cósmica.

Mi participación en el video no fue autorizada por mí, pero es utilizada para validar lo que ahí se promueve como método IRECA (Instituto de Investigación sobre la Energía Cósmica Aplicada, por sus siglas en italiano). De esa manera la organización Life Quality Project hace uso fraudulento de mi imagen y mi exposición sobre los rayos cósmicos, para mostrar al público una visión seudocientífica de las cosas. Según esto, tenemos centros de asimilación de energía cósmica en nuestro cuerpo, y a través de las palmas de la mano del curador, un haz de electrones sale para hacer el milagro de armonizar nuestro ser liberándonos de las enfermedades.

Life Quality Project es el nombre de la organización que promueve varias maneras de mejorar la vida de las personas a través del uso de seudomedicina, de productos milagro, de cursos místicos para acceder a la “vía”, etc. Esta empresa parece estar dirigida por un italiano que hace su agosto aun en septiembre y el resto del año. La organización está presente en muchos países y es visiblemente exitosa porque ahora se pueden encontrar muchos videos promocionales.

He intentado en varias ocasiones denunciar el video sin éxito. No es posible comentar en él y no es posible retirarlo: Youtube defiende sus materiales. Las reiteradas quejas quedan sin respuesta a pesar de que el portal promete una reacción en 24 horas. No sólo YouTube permite tales abusos, hasta ahora ningún gobierno ha prohibido esta organización. Algunos la han calificado de ser una secta porque sus procedimientos recurren a la manipulación emocional de las personas, es controlada de manera central por el fundador y sus más cercanos colaboradores. Al líder espiritual se lo reconoce como “Maestro” y se presenta como un ser carismático cuya visión y misión es la del guía espiritual.

El uso indebido de mi imagen, mi voz y mi exposición de la radiación cósmica fuera de contexto desafortunadamente no es la única acción indebida de la nueva religión. En internet se puede encontrar más sobre la manera como esta organización opera. Ojalá que un día la Secretaria de Gobernación o alguna de sus Subsecretarias atienda este insidioso aspecto de la vida social en nuestro país. Como decía Mario Bunge: “La seudociencia es peligrosa porque contamina la cultura y, cuando concierne a la salud, la economía o la política, pone en peligro la vida, la libertad o la paz”.

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8. La Nueva Medicina Germánica: una teoría delirante y peligrosa.

FUENTE: Diario Médico

 

 

Con el título “Pseudociencia, el lado oscuro: la Nueva Medicina Germánica”, el Diario Médico ha publicado un artículo de Emilio J. Molina, vicepresidente de la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (APETP) y colaborador del Observatorio contra las Pseudociencias, Pseudoterapias, Intrusismo y Sectas Sanitarias de la Organización Médica Colegial (OMC). El autor advierte de los peligros de la Nueva Medicina Germánica, pseudociencia que aún cuenta con seguidores, algunos profesionales sanitarios, en España. Recientemente, un médico ha sido inhabilitado por el Colegio de Barcelona por practicar esta pseudoterapia.

“El pueblo que no conoce su historia está condenado a repetirla”. Es la frase que me viene a la cabeza al hablar de pseudoterapias, pseudociencias, sectas sanitarias y la parafernalia social que las rodea. La frase surge a la hora de hablar de la Nueva Medicina Germánica, del recientemente fallecido ex-doctor Ryke Geerd Hamer, para poner en contexto las noticias recientes que estamos oyendo sobre la inhabilitación de un médico (uno de demasiados, me temo) que a día de hoy sigue propagando sus aberrantes creencias sobre el cáncer.

La parte histórica, de hecho, se ha contado muchas veces, así que la resumiré, pues lo que me interesa contar aquí son los lodos actuales que surgen de aquellos barros. Verano del 78 del siglo pasado. El hijo de este médico alemán es alcanzado por una bala perdida y termina muriendo. Unos años después, Hamer se autodiagnostica un tumor de testículos. Al parecer él se cura con cirugía, pero en su cabeza queda fermentando la relación hijo-testículos, de la que surgirá el germen de la Nueva Medicina Germánica: un shock emocional sería la causa de los tumores, los cuales no serían más que la forma que tendría el cuerpo de somatizar ese conflicto no verbalizado.

Por tanto, según él, para curarse de un cáncer bastaría dejar que el cuerpo siguiera su curso natural de curación, sin interferir en él (sin intervenciones médicas de ningún tipo, incluyendo paliativos contra el dolor), y buscar la extroversión de ese conflicto emocional no resuelto. Esta visión delirante (cabe apuntar que Hamer tenía problemas mentales de tipo psicótico) se potencia cuando su mujer, poco después, sufre un cáncer de pecho.

La primera de sus cientos de víctimas (por su propia mano, ya que su movimiento cuenta con miles de ellas constatadas en toda Europa) sería su propia mujer, a la sazón oncóloga. Apunto este dato por dos cuestiones: la primera, como muestra de que Hamer creía en sus propuestas hasta las últimas consecuencias, a diferencia de charlatanes que son plenamente conscientes de sus fraudes. La segunda, más importante, para recordar que la capacitación profesional de alguien no le confiere necesariamente inmunidad ante este tipo de propuestas (y menos aún en un estado de alta vulnerabilidad como tras un diagnóstico de cáncer).

Lejos de hacerle cambiar de opinión, fue el inicio de un reguero de muertes en su clínica, en la que cuando detectaban que un paciente estaba en las últimas, se derivaba a un hospicio para que no le computaran la muerte, pero en otras ocasiones incluso se relata (por parte del personal de la propia clínica) como Hamer continuaba tratando cadáveres en un estado de rigor mortis, incapaz de claudicar a la realidad de la falta de eficacia de su método.

Estas irregularidades le costaron la retirada del título, pero esto no supuso de ninguna manera un freno a su labor. Hamer llegó a España (concretamente en Málaga) huyendo de la justicia de Alemania y Francia por la muerte de varios pacientes a los que había seguido atendiendo de forma ilegal. En España creó cantera, entre ellos formando a diversos médicos. Son muchos sus discípulos, que aún propagan en España y Latinoamérica estas premisas a quienes la quieran oír. Constan en la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (APETP) y RedUNE gente afectada (incluyendo alguna víctima mortal).

Sus seguidores no se esconden, precisamente. Basta una búsqueda en internet sobre Hamer o su Nueva Medicina Germánica para comprobar que son muchos los difusores en forma de consulta, cursos, o artículos en panfletos en los que profesionales sanitarios difunden las tesis hamerianas. Incluso existen asociaciones que promueven activa y abiertamente sus premisas.

Algunas de sus víctimas (muchas mortales) en España fueron sonadas, aunque ya nadie las recuerde: desde Helena Lumbreras, Ana Pena (que fue a su vez responsable de su enorme promoción en el programa “Todos contra Hamer” en RTVE), la entonces niña Olivia Pilhar o Michaela Jakubczyk-Eckert (quienes peregrinaron a España a ponerse en sus manos), hasta la reciente muerte de una de sus primeras seguidoras y traductora oficial, Itziar Orube, pasando por varias víctimas anónimas de las que algunos oncólogos nos constatan que recibieron poco menos que sus despojos retorcidos de dolor cuando ya no había nada que hacer.

Hamer acabó sus días autoexiliado en Noruega, desde donde sabemos que seguía tratando hasta muy recientemente, vía telefónica, a víctimas en España (víctimas que siguen rechazando todo tratamiento para sus crecientes tumores por considerarse curadas). Estamos en 2018 y seguimos con afectados de cáncer (algunos con muy buen pronóstico si se trataran) que rechazan la medicina que tildan de tradicional para abrazar el nuevo paradigma de Hamer. En Internet, los grupos de Facebook, las webs de cursos y los vídeos de Youtube sobre el tema florecen por doquier, a la vista de todos. El tema es larguísimo y da mucho de sí, ya que hay derivas de este movimiento, como la Biodescodificación o la Bioneuroemoción. Hemos olvidado la historia (aunque muchos ni siquiera la conocimos), y estamos repitiéndola, una y otra vez.

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9. La Biodescodificación: toda enfermedad tiene orígenes emocionales.

FUENTE: Diario Médico

 

 

Con el título “Pseudociencia, el lado oscuro: la biodescodificación”, el Diario Médico ha publicado un artículo de Emilio J. Molina, vicepresidente de la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (APETP) y colaborador del Observatorio contra las Pseudociencias, Pseudoterapias, Intrusismo y Sectas Sanitarias de la Organización Médica Colegial (OMC). El autor advierte de los peligros de la biodescodificación, pseudoterapia que continúa los designios de otra pseudociencia, la denominada Nueva Medicina Germánica. Al igual que ésta, la biodescodificación achaca, sin ninguna evidencia, las enfermedades a orígenes emocionales.

“Si no quieres caldo, toma dos tazas”. Tras hablar del horror de la Nueva Medicina Germánica, éste artículo trata su igualmente aberrante deriva, propuesta por dos discípulos directos de Hamer en Francia, el médico Claude Sabbah y el enfermero Christian Flèche. La biodescodificación (también conocida como descodificación biológica o biología total) se puede resumir en que es la subida de la apuesta de las delirantes tesis de Hamer (recordemos, el origen de cáncer como una somatización de un shock emocional no verbalizado), mediante la que se propone que ya no es sólo el cáncer, sino todas las enfermedades las que están causadas por “un conflicto emocional no resuelto”.

Esta extralimitación de la consabida psicosomática bebe, además, de ideólogos pseudocientíficos como Salomon Sellam o Bruce Lipton, cuyas proclamas vienen a decir, abreviadamente, que vía genética y epigenética los conflictos emocionales se codifican en una supuesta memoria celular que será la responsable de que nuestras células los arrastren en el tiempo y se somaticen como enfermedades.

Si bien es cierto que las investigaciones apuntan a que entornos de alto estrés (entendido como el estrés celular que podría causar un déficit de nutrientes) ocasionan cambios epigenéticos que pueden tener repercusiones incluso en generaciones posteriores, en el contexto de estos movimientos sectarios el mensaje es el siguiente: los conflictos emocionales, propios o heredados de ancestros, están codificados en las células y son los que ocasionan todas las enfermedades. Biunívocamente, además. Para ello, se han llegado a compilar “diccionarios emocionales de la enfermedad”, que relacionan conflicto emocional y enfermedad.

De esta suerte, y mediante una magia simpática similar a los simbolismos que usaba Hamer en su delirio, se establecen relaciones arbitrarias del tipo de “duelen las lumbares porque se soportan cargas familiares” o “se tiene un cáncer en el pecho izquierdo porque hay un conflicto emocional no resuelto con la madre”, por poner dos ejemplos tan absurdos como repugnantes, en tanto que cargan la culpa al enfermo por estarlo y a su entorno familiar por ser la fuente del conflicto.

Si la Nueva Medicina Germánica tuvo su difusión en RTVE, la biodescodificación no iba a ser menos. En octubre del año pasado, aparecía en el programa “Complementarios” de RNE dedicado a la promoción de supuestas terapias complementarias (y en la práctica, pseudociencias inútiles y peligrosas) una entrevista a un odontólogo también francés, Christian Beyer, que ha creado una variación enfocada a los dientes, la descodificación dental. Las quejas ante el defensor del espectador se saldaron con una reiteración de su idoneidad por el responsable de contenidos, quien alegaba que lo que decía era científico y que no tenían constancia de que se le estuviera persiguiendo en su país.

Me gustaría que los lectores se tomaran un minuto para meditar hasta qué punto la sociedad está a merced de los charlatanes cuando quienes deberían defenderles ante ellos (cierto personal sanitario y algunos medios de comunicación) son sus inmejorables promotores.

A día de hoy, mientras que Sabbah ha pasado recientemente por prisión por la muerte de un paciente de cáncer de próstata que rechazó su tratamiento para intentar curarse con estas propuestas, Flèche y Beyer siguen activamente difundiendo en España e Iberoamérica estas premisas letales y calificadas sin ambages como secta pseudoterapéutica precisamente por una organización gubernamental francesa de control de las mismas, Miviludes. Esto no ha evitado que constantemente estemos viendo la intromisión de sus promotores (incluso de entidades dedicadas a dar «formación» en ellas) en todo tipo de estamentos públicos de educación y salud. Como fuere, ojalá se hubiera quedado la cosa en estas dos tazas. Aún hay contenido para continuar esta pequeña saga de sectas pseudoterapéuticas basadas en “el origen emocional”.

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10. La Bioneuroemoción: una lista de afectados tan larga como cruel.

FUENTE: Diario Médico

 

 

Con el título “Pseudociencia, el lado oscuro: la bioneuroemoción”, el Diario Médico ha publicado un artículo de Emilio J. Molina, vicepresidente de la Asociación para Proteger al Enfermo de Terapias Pseudocientíficas (APETP) y colaborador del Observatorio contra las Pseudociencias, Pseudoterapias, Intrusismo y Sectas Sanitarias de la Organización Médica Colegial (OMC). El autor completa con la bioneuroemoción la triada –comenzada con la Nueva Medicina Germánica y la biodescodificación– de pseudoterapias que achacan la enfermedad a conflictos emocionales y que prometen su curación al margen de la Medicina.

No hay dos sin tres. Tras hablar de la Nueva Medicina Germánica de Hamer (el cáncer como causa de un conflicto emocional) y de su deriva de Sabbah y Flèche, la biodescodificación (toda enfermedad como causa de un conflicto emocional), llega el turno de la nieta de las tesis de Hamer: la bioneuroemoción. Enric Corbera, un naturópata de Rubí, tras una temporada siendo alumno de biodescodificación, creó el Instituto Español de Biodescodificación y la Asociación Española de Biodescodificación junto a Rafael Marañón. Empezó dando charlas sobre ella en España ayudado de grupos de difusión de corte pseudocientífico. Trajo a Flèche a dar algunos de los cursos y llegó a publicar sus apuntes como libros propios.

Con la ayuda de un famoso adepto a ese movimiento, Txumari Alfaro (quizá ahora alguien entienda mejor alguna de sus desnortadas proclamas mediáticas), consiguió introducir la biodescodificación en cursos oficiales en Cuba. La historia es un tanto rocambolesca en este punto, ya que, tras las demandas de plagio que recibe de Flèche, decide registrar la bioneuroemoción y renombrar las instituciones que había creado.

La bioneuroemoción usa como eje diferenciador y vertebrador el denominado Un Curso de Milagros, un libro escrito a finales de los 60 por la psicóloga Helen Schucman durante sus episodios de esquizofrenia, redactando lo que según ella le dictaba la voz de Jesucristo. Este libro, usado como desestabilizador psicológico por parte de muchos movimientos sectarios, induce a sus lectores a creer que la realidad es creada literalmente por nuestras mentes.

Corbera hace su relectura en clave de biodescodificación promulgando que “cualquier problema de nuestras vidas ocurre por un conflicto emocional no resuelto del que tenemos que tomar consciencia para sanarnos”. Con esta base, declara literalmente que un accidente, una violación o una agresión es creada por nosotros a causa de un pensamiento de desamor hacia nosotros mismos. Por supuesto, la enfermedad es solo una más de estas manifestaciones que “pedimos al universo”.

El batiburrillo que genera Corbera no es desdeñable: trata de avalar sus premisas mediante la física cuántica (la Real Sociedad Española de Física se ha desmarcado de esas interpretaciones aberrantes), mezcla conceptos de new age, de pseudofilosofía, pseudorreligión, pseudobiología, toma como fuentes fiables a pseudocientíficos como Deepak Chopra o los ya mencionados Lipton o Sellam… El preocupante resultado es un movimiento que factura varios millones de euros al año y actualmente podría contar con más de 400.000 seguidores y que crece al ritmo de unos 7.000 nuevos cada mes, a los que convence de que pueden recuperar su salud (entre otras proclamas) tomando conciencia de los conflictos que han originado esos problemas.

Como en los movimientos anteriores, la lista de gente que retrasa o rechaza su tratamiento por estas creencias es grande y va en aumento, destacando el caso de una fallecida, Maribel Candelas, que el propio Corbera resaltaba como un ejemplo de curación de un cáncer metastásico sin necesidad de tratamiento, siguiendo únicamente su método. Desde diabéticos que abandonan la insulina hasta jóvenes que ni siquiera quieren oír hablar de su linfoma (porque “si no creen que están enfermos, entonces no estarán enfermos”), la lista de afectados es tan larga como cruel.

Desgranar este movimiento sería muy largo. Incluye aspectos tan repugnantes como la denominada cuarentena, en la que se les insta a cortar radicalmente todo contacto con sus seres queridos, o la profusa infiltración en medios de comunicación, colegios profesionales, universidades (como la Iberoamericana de Torreón en México y la Facultad de Medicina de Rosario en Argentina, que le han facilitado poder ofertar posgrados en la materia) y, por supuesto, una miríada de centros cívicos de ayuntamientos, por parte de la mucha gente que ha sido formada como acompañante y se cree con capacidad de tomar a su cargo la salud física y mental de terceros.

No son pocos sus adeptos con licenciatura sanitaria (Medicina, Enfermería, Fisioterapia, Psicología) que lo difunden desde el sistema sanitario. Preocupan especialmente aquellos que tratan con pacientes oncológicos. Solo hay que entrar en la sección de formadores del Enric Corbera Institute y contar el número de médicos que aparecen. El propio Corbera se licenció en Psicología, sin que hasta la fecha el Colegio Oficial de Psicólogos de Cataluña haya tomado medidas, pese a hacer más de tres años que se denunció su flagrante mala praxis.

La tríada de las principales sectas pseudoterapéuticas basadas en el origen emocional de la enfermedad (Nueva Medicina Germánica, biodescodificación y bioneuroemoción) termina aquí, pero los grupos similares son muchos más, alguno surgido directamente de su seno, como la bioemoción. Hay otros movimientos parecidos (sintergética, la sanergia, la neuroemoción, bioreprogramación, biodeprogramación, neuroprogramación, neurocoherencia, psiconeurobiología, emocodificación, bioconsciencia…) y todos culpan de alguna forma al individuo y a su entorno de los males que sufren, y prometiéndoles curaciones mediante la “toma de conciencia de los conflictos que les han enfermado”.

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La RIES es una red de expertos y estudiosos católicos sobre el fenómeno sectario y la nueva religiosidad, presentes en España y Latinoamérica, y abarcando las zonas lusoparlantes. Pretende ofrecer, también con este boletín informativo, un servicio a la Iglesia y a toda la sociedad. La RIES no se responsabiliza de las noticias procedentes de otras fuentes, que se citan en el momento debido. La RIES autoriza la reproducción de este material, citando su procedencia.