IGLESIA | Johan Pacheco

 

Nota Eclesial: En el corazón de Dios no se apaga la caridad

 

El Santo Padre en su mensaje para la Cuaresma 2018 propone en su meditación el pasaje del Evangelio de Mateo: “Al crecer la maldad, se enfriará el amor en la mayoría” (24,12).

 

 

17 febrero 2018, 10:44


 

 

Al comenzar el camino cuaresmal estamos invitados a disponer de un corazón plenamente disponible para abrigar el calor de la gracia de Dios, resguardándolo del frio del pecado que hace indiferente a la persona. La cuaresma es un camino de misericordia que nos lleva al encuentro pascual con el Señor.

El Santo Padre en su mensaje para la Cuaresma 2018 propone en su meditación el pasaje del Evangelio de Mateo: “Al crecer la maldad, se enfriará el amor en la mayoría” (24,12). Dejar enfriar el amor es alejarnos de Dios, cerrarnos a su misericordia y negarnos a vivir la experiencia de las obras de misericordia con el prójimo.

“Lo que apaga la caridad es ante todo la avidez por el dinero, “raíz de todos los males” (1 Tm 6,10); a esta le sigue el rechazo de Dios y, por tanto, el no querer buscar consuelo en él, prefiriendo quedarnos con nuestra desolación antes que sentirnos confortados por su Palabra y sus Sacramentos. Todo esto se transforma en violencia que se dirige contra aquellos que consideramos una amenaza para nuestras «certezas»: el niño por nacer, el anciano enfermo, el huésped de paso, el extranjero, así como el prójimo que no corresponde a nuestras expectativas”, expresa el Papa Francisco en su mensaje de cuaresma 2018.

Ante la tentación de dejar enfriar el corazón por la maldad, debemos asumir el compromiso de avivar en nosotros el fuego del amor de Jesucristo, a través de las prácticas cuaresmales de la oración, el ayuno y las obras de caridad. “Si en muchos corazones a veces da la impresión de que la caridad se ha apagado, en el corazón de Dios no se apaga. Él siempre nos da una nueva oportunidad para que podamos empezar a amar de nuevo”.

En el corazón de Dios no se apaga la caridad, siempre está dispuesto amarnos y transformarnos en instrumentos de su caridad para calentar un mundo frio por la maldad y el pecado. Permanezcamos en el corazón de Dios, guiados por su Palabra y alimentados por sus sacramentos.

 

Johan Pacheco

@padrejohan