Católicos
El gobierno regional prometió diálogo con todos los sectores

La enseñanza concertada apela a las Cortes Valencianas por la continua discriminación del tripartito de izquierdas

El presidente autonómico Ximo Puig sigue sin recibir a la Mesa por la Educación en Libertad pese a solicitarlo en varias ocasiones

La Mesa por la Educación en Libertad – que agrupa a diferentes federaciones, sindicatos y entidades que defienden la libertad de enseñanza, ante los “ataques” que viene sufriendo por parte del tripartito de izquierdas que gobierna en la Comunidad Valenciana desde 2015 – califica de “insólito la falta de diálogo del gobierno valenciano con la enseñanza privada concertada”.


La tensión ha ido en aumento, ante la supresión de conciertos, el recorte de derechos de los centros concertados y el problema de los profesores de Religión. Pese a los intentos de dialogar con el conseller de Educación, Vicent Marzà (Compromís), la Mesa por la Educación en Libertad viene apelando al presidente del Gobierno valenciano, el socialista Ximo Puig, con sendas peticiones de entrevistas del pasado 10 de junio y 18 de octubre.

Ante el mutismo total de Puig, la Mesa por la Educación en Libertad no ceja en su empeño por defender sus derechos, y ahora ha recurrido a las Cortes Valencianas, “para que interceda ante Puig y nos reciba, para escuchar nuestras propuestas de mejora en la educación valenciana”, ha afirmado Vicente Morro, portavoz de la Mesa por la Educación en Libertad.

 

Negar la condición de ciudadanos

Morro ha recordado a RC que “Ximo Puig prometió diálogo y colaboración en su debate de investidura con el conjunto de la sociedad valenciana y especialmente con los sectores de la comunidad educativa”, y afirma que la actual situación es “negarnos la condición de ciudadanos a quienes defendemos la libertad de enseñanza, puesto que no se nos recibe”.

“Confiamos que el escrito presentado en las Cortes valencianas hará recapacitar al presidente Puig y nos recibirá en un plazo breve, para tratar muchos temas que nos preocupan, como la renovación de conciertos o el decreto de plurilingüismo, que merma la libertad de los centros pues prima el valenciano sobre el castellano para alcanzar un nivel máximo de inglés, lo que supone una clara discriminación del castellano”, expone Morro a este confidencial.

Desde la Mesa por la Educación en Libertad afirman que “ni mendigamos nada ni nos resignamos a que se nos ignore: exigimos nuestro derecho a dialogar con poder político y a defender la libertad de enseñanza”.