Gran éxito del inicio de la coral parroquial. ¿Alguien se apunta a cantar con nosotros?

 

Ya he dicho muchas veces, sigo con ello, que la forma que tiene uno de mover la pastoral de la parroquia es simplemente la de uno, y que si lo voy contando es por si a alguien le sirve alguna cosa. Yo al menos, cuando voy a una parroquia para concelebrar, una reunión, de visita o lo que sea, me fijo en todo. Hay cosas que al verlas me digo: “anda, qué buena idea” y miro si en mi parroquia serviría. Otras cosas quizá me sirven para lo contrario, porque a lo mejor uno se estaba pensando algo y al verlo realizado te das cuenta de que no, de que no era eso.

La vida parroquial normalita ya sabemos lo que es: celebraciones sacramentales y de oración, catequesis para todas las edades, atención a los pobres y hacer que la comunidad se mantenga unida y viva.

Para mí el reto es mantener la ilusión de la comunidad y andar cada día, además de intentar que lo básico vaya lo mejor posible, buscando hilitos para tirar de la gente. Es decir, inventar para ver cómo se consigue que venga ¡uno nuevo! o que alguien más pasivo se comprometa al menos algo en la vida de la Iglesia.

Dentro de ese tirar del hilito decidimos este año, como regalo del quinto aniversario de la dedicación del templo parroquial, intentar crear una coral en la parroquia. La coral tiene muchas ventajas: hace grupo, familia, atrae a personas alejadas de la iglesia pero que tal vez se animen a cantar, convierte a feligreses que solo participaban en la misa dominical en gente un poco más activa y por supuesto ayuda a dignificar el culto.

En fin, que hace unos días les daba a conocer el proyecto. Hoy puedo decirles que tenemos un director ilusionado y con enormes cualidades, Rotislav Federov, y que ayer tuvimos la primera reunión para poner en marcha la coral.

Me decía el director que los comienzos siempre son duros, y que si conseguíamos reunir a quince personas para empezar, sería para darse por satisfechos. Je. ¿Quince personas? ¡Cuarenta el primer día! de las cuales veinte ya han rellenado su ficha de inscripción. Y algunos más que no pudieron acudir ayer tarde pero que contamos con ellos.

El director ensayará en la parroquia los martes y los jueves de 20 a 22 h., y además ofrece la posibilidad, si algunos lo desean, de tener previo a los ensayos, clases de canto.

Me hacía ilusión contárselo. Y no solo eso. También quería ofrecerles la posibilidad de que se unieran a la coral. Yo sé que entre los lectores del blog hay muchos madrileños e incluso gente que vive cerquita de la parroquia. Pues, oigan, ¿por qué no?

Piensen la posibilidad. Y si se animan, es tan fácil como enviar un correo a la parroquia o simplemente pasarse cualquier martes o jueves de 20 a 22 h. Me da, visto lo de ayer, que lo vamos a pasar en grande.