Los Obispos de la provincia eclesiástica de Zaragoza han preparado una Jornada Sacerdotal de reflexión, oración y convivencia fraterna para los miembros de los presbiterios de las diócesis aragonesas. La jornada tendrá lugar el próximo 2 de mayo en Zaragoza y será presidida por el prefecto de la Congregación para los Obispos, el Cardenal Marc Ouellet.
La jornada comenzará a las 10:00 horas con el canto de la hora menor, tras la cual, el Cardenal Ouellet pronunciará una conferencia con el título “El Concilio Vaticano II y sus Constituciones”. Tras la conferencia y unos momentos de descanso, a las 12:00 horas se celebrará la sagrada eucaristía en la Catedral-Basílica de Nuestra Señora del Pilar. La misa será presidida por el Cardenal y concelebrada por el Arzobispo de Zaragoza, monseñor Manuel Ureña, los Obispos de las diócesis sufragáneas y los sacerdotes presentes.
Al término de la eucaristía, y tras un breve concierto, la jornada culminará con una comida de hermandad.
El Cardenal Ouellet nació en la pequeña ciudad de La Motte, en Canadá, hace 68 años. Estudió Pedagogía y se ordenó sacerdote a los 24 años. Luego se trasladó a Colombia para enseñar Teología en el seminario mayor de Bogotá, que dirigía la Compañía de Sacerdotes de San Sulpicio. Cuatro años más tarde se hizo miembro de este pequeño grupo de sacerdotes cuya espiritualidad se centra en la formación de los sacerdotes y seminaristas. Colaboró en la revista de Teología Communio que fundaron los eminentes teólogos Joseph Ratzinger y Hans Urs von Balthasar. Comenzó a trabajar en el Vaticano en el 2001 en el Pontificio Consejo de la Unidad de los Cristianos. Juan Pablo II lo nombró Arzobispo de Québec y primado de Canadá, y en 2003 lo nombró Cardenal. Benedicto XVI lo hizo prefecto de la Congregación para los Obispos y presidente de la Comisión para América Latina.
Acerca de la nueva evangelización, el cardenal Ouellet ha afirmado “creo que para las familias en general, la transmisión de la fe a los propios hijos es uno de los grandes retos del mundo de hoy por la secularización, por las provocaciones que vienen de una cultura que está apartada del Cristianismo. Es necesario educar a los hijos en la fe, respetando su libertad, pero proponiendo de manera decidida la fe”.
El Cardenal Marc Ouellet habla seis idiomas con fluidez: francés, inglés, español, alemán, italiano y portugués.