Iglesia-Estado
15 de noviembre del 2012

Grupos denominados cristianos aprovecharon la huelga para arremeter contra los obispos. Los acusan de tardar mucho en hablar de la crisis y poco del 'matrimonio gay'

"Lamentamos el silencio de nuestros obispos que han tardado años en decir alguna vaga palabra sobre la crisis mientras se muestran muy rápidos para salir al paso de la sentencia del tribunal constitucional  que declara legal la unión de personas del mismo sexo".


 

El comunicado lanzado por Comunidades Cristianas Populares basa su apoyo a la huelga general en que "la pobreza y la exclusión social están aumentando de modo vertiginoso lo que está provocando una verdadera agitación social entre los sectores populares de estos países".

Prosigue: "Las medidas están provocando situaciones verdaderamente desesperadas y angustiosas: son ya cerca de 6 millones las personas sin trabajo en nuestro país, son 400000 los desahucios que se han ejecutado y que están dejando en la calle a familias enteras".

"El número de suicidios ha aumentado de modo alarmante. Los trabajadores han visto destrozados sus derechos. La sanidad se está privatizando a pasos. La enseñanza está siendo destrozada. Los pensionistas han visto disminuir de modo muy importante su poder adquisitivo con el aumento del IRPF, el IVA, el copago farmacéutico y la subida de precios generalizada".

Además, subrayan: "este gobierno no tiene en cuenta a las personas, sino que está mirando siempre a contentar a la Sra. Merkel y al sistema financiero europeo y mundial. Hasta el punto de llegar a reformar la constitución los dos grandes partidos para garantizar el pago de la deuda antes que cualquier otra cosa."

Por esta razón, dicen: "Como cristianos, lamentamos que nuestros dirigentes,  que presumen de católicos , desprecien lo que es el núcleo del mensaje del Evangelio: "no se puede servir a Dios y al dinero".  La persona es lo primero. Hay que trabajar por el bien de todos los ciudadanos, no por el interés de los mercados".

Lamentamos también el silencio de nuestros obispos que han tardado años en decir alguna vaga palabra sobre la crisis mientras se muestran muy rápidos para salir al paso de la sentencia del tribunal constitucional  que declara legal la unión de personas del mismo sexo.

Concluyen diciendo: "Animamos por tanto a todos los ciudadanos de España a participar de modo activo en la huelga general para pedir un cambio radical en la política económica del este gobierno que está llevando al caos a la mayoría de la población de este país".

Por su parte, Cristianos por el Socialismo señala que: "todos sabemos que esta huelga no es un fin en sí mismo sino un medio para luchar contra la situación desastrosa en que nos está hundiendo este gobierno. No sabe leer las protestas de las pancartas, no escucha el clamor del pueblo, no legisla para la gente. Es un Gobierno sordo, mudo y ciego. Se trata de una huelga en defensa de la sociedad que se ve abocada a una catástrofe social y económica.

Y añaden: "Todos estos recortes y leyes no tienen como objetivo salir de la crisis, sino despojarnos de nuestros derechos para favorecer a los más poderosos, por eso el día 14  de Noviembre, CPS apoya todos los movimientos que favorecen la huelga. La huelga es desafío, aportación y lucha colectiva. Todos tenemos la capacidad de luchar por otra sociedad distinta, más humana, justa y solidaria".