29.09.12

Carlos Herrera denunciado por los del sindicato andaluz de trabajadores

A las 7:44 AM, por Tomás de la Torre Lendínez
Categorías : General

Los que a diario escribimos sobre la actualidad social y eclesial somos conscientes que estamos en unos tiempos donde los pájaros disparan a las escopetas, lo blanco es negro, los seres humanos muerden a los perros, por el mar corren las liebres, por los montes las sardinas y los coches tienen alas como los aviones, procurando no chocar con los burros que también vuelan por los aires.

A Carlos Herrera, el dueño de las mañanas de la radio española, le han plantado una denuncia los miembros del Sindicato andaluz de trabajadores. Los acompañantes de las aventuras veraniegas por tierras andaluzas del político Sánchez Gordillo.

El motivo de la denuncia es presuntamente contra la vulneración del honor del Sindicato citado, cuando el gran locutor de Onda Cero, se despachó el pasado 21 de septiembre, en su programa con palabras como como “mangantes” y “extorsionadores", “golfos", “chusma y “proetarras".

Las palabras textuales que constan en la denuncia son, presuntamente, éstas:

“El sindicato este de mangantes, de golfos, este sindicato de extorsionadores que es el SAT (…) Difícil encontrar más golfería en una organización que la que tiene esta (…) Al final toda la chusma se junta con todo tipo de proclamas proetarras”.

Carlos Herrera, vecino de Andalucía, empresario en la misma tierra, periodista con los pies en el suelo, el primero de las mañanas de la radio en Onda Cero, en su programa Herrera en la Onda, está seguro, mide muy bien sus términos, conoce exactamente la realidad social y laboral del Sur español, y, para rematar, fue víctima del terrorismo etarra en los duros años de plomo cuando le enviaron una caja de puros desde la central del crimen vasco.

Carlos Herrera es un cristiano miembro de varias cofradías sevillanas. Ha recibido el premio Bravo otorgado por la Conferencia Episcopal Española. Es un profesional de la comunicación deseado por los directivos empresariales de la cadena Cope, donde tuvo una época en la que trabajó antes de llegar a ser la figura que es hoy.

Ahora, los denunciantes dicen en el texto de la misma que comportamientos como estos “no forman parte de la honradez y ética de la cultura cívica democrática y en concreto vulneran directamente los valores expresados por las normas supremas de nuestro ordenamiento y compartidos por el SAT.”

Repito lo del principio: Ahora los círculos son cuadrados, las bicicletas llevan motor de agua, las tejas se cuecen al sol, y se come con las manos pues los cubiertos pueden herir a los comensales.

Mientras acabo este post, no sé si estoy despierto o soñando.

El texto completo de la noticia y de la denuncia está haciendo clic aquí.

Tomás de la Torre Lendínez