Una ONG holandesa garantiza su continuidad

Dos clínicas abortistas se declaran en huelga porque la Comunidad de Valencia no les paga una deuda de medio millón de euros

 

Las clínica Mediterránea Médica de Valencia y DEIA Médica de Castellón, dedicadas a matar a seres humanos antes de nacer, han iniciado este lunes un cese de actividad en protesta por el impago de algo más de 500.000 euros que les adeuda la Generalitat. Así lo ha confirmado a Efe el director de la Mediterránea Médica, Josep Lluis Carbonell, quien ha indicado que ya no hay «peligro de cierre» porque el pasado sábado firmaron un protocolo con una ONG holandesa-alemana por la que ésta les financiará a crédito cero durante cinco años.

24/09/12 1:36 PM


(Efe/InfoCatólica) Además, cuentan con la ayuda de un «par de ciudadanos españoles sensibles con esta materia y con posición económica», según Carbonell.

«Podremos mantenernos un tiempo sin problemas, pero se trata de préstamos», ha precisado el facultativo, quien ha agregado que se trata de una cantidad suficiente para seguir con sus actividades durante al menos seis meses.

No obstante, el director de Mediterránea Médica espera que la Conselleria de Sanidad le abone parte de la cantidad que les adeuda, y ha recordado que el pasado viernes el conseller de Sanidad, Luis Rosado, dijo que se les pagaría cuando lleguen al Gobierno valenciano los Fondos de Liquidez Autonómica (FLA).

Josep Lluis Carbonell ha señalado que de momento ningún responsable de la Conselleria se ha puesto en contacto con ellos. «Queremos que nos digan oficialmente que se nos pagará con el FLA», ha afirmado.

El cese de actividad que ha comenzado este lunes se prolongará durante dos semanas y afectará a las mujeres que quieran matar a sus hijos antes de nacer tanto en el primer como en el segundo trimestre, aunque durante este tiempo mantendrá unos servicios mínimos de urgencias.

De esta forma, ninguna mujer que sobrepase el término legal de hasta 14,6 semanas (abortos voluntarios) o 22,6 semanas en el caso de los malformados dejará de ser atendida, según Carbonell.

El cese afectará solo a las pacientes enviadas por la Conselleria de Sanidad, que constituyen el 80% del total, y no afectará a las pacientes privadas ni de los centros comarcales ni de otras autonomías que también remiten a mujeres.