18.12.11

 

Llevaba poco tiempo viviendo en Aragón, concretamente(1) en la frondosa y cosmopolita comarca de los Monegros(2), cuando me enteré de que la comunidad eclesial evangélica más importante de Zaragoza iba a celebrar una tanda importante de bautismos en el salón de actos del colegio salesiano de la capital aragonesa. Tiempo después escribí un post en el que relataba lo que vieron mis ojos. Entonces dije:

Entre los bautizados, por supuesto, la mayoría habían sido bautizados como católicos de pequeños. Es decir, el colegio católico cedía sus instalaciones para que quedara constancia, por vía del rebautismo, de la renuncia al bautismo católico de unas 20-30 personas. En realidad el evangélico ex-católico que se rebautiza está más haciendo una afirmación de su fe evangélica que una renuncia a su pasado católico, que en muchos casos es literalmente inexistente desde la primera comunión. Sé bien lo que es eso porque yo mismo me rebauticé como protestante evangélico en las Lagunas de Ruidera hace ya unos 18 años. Pero ciertamente me habría extrañado mucho que mi “rebautismo” tuviera lugar, por ejemplo, en el salón de actos de los Escolapios de Getafe, donde asistí como alumno en mi infancia.

Por eso, no me extrañé lo más mínimo cuando ayer leí un post de Paco Pepe en su blog La Cigüeña de la Torre, en el que un fiel de Zaragoza informaba de que los salesianos siguen cediendo sus instalaciones a los evangélicos para que realicen sus actividades, que van desde un rastrillo para recaudar fondos para su obra social como para organizar un concierto de gospel cuya recaudación irá destinado al mismo fin.

El católico zaragonano aprovecha la ocasión para señalar algo que no debe sorprender a nadie:

En cuanto al ecumenismo, creo que resulta impensable por parte de ellos, he estado unos días en cama y he oído algún programa de RKM Radio FM 104’80 en Zaragoza y es vergonzoso como se dirigen hacia los católicos y más aún, como hablan contra nuestro Papa.

Si alguien tiene alguna duda sobre cuál es el carácter habitular de los evangélicos españoles, basta con que busque las noticias que salen de la FEREDE o de la Alianza Evangélica Española que tienen que ver con nuestra Iglesia. O puede leerse la serie de artículos de Bruno Moreno en respuesta a César Vidal, que está embarcado en el intento de demostrar que España es un país penoso por el mero hecho de ser católico, a diferencia de lo buenos que son algunos países por el mero hecho de ser protestantes. Es decir, el protestantismo “ibérico” es profundamente fiel a sus raíces y, por tanto, furibundamente anticatólico. Para ellos el catolicismo es una especie de mix de cristianismo y paganismo en el que este último lleva la voz cantante. En ese sentido, no parece muy lógico que la Iglesia en España, concretamente una orden religiosa, se preste a ceder sus instalaciones para facilitar a los evangélicos su labor “misionera", que está dirigida fundamentalmente a los católicos para que dejen de serlo, aunque muchos ya lo han hecho sin necesidad de que un evangélico se lo proponga. Eso no es ecumenismo. Eso no es caridad hacia el hermano separado. Es hacer el primo.

Luis Fernando Pérez Bustamante

Colabora con InfoCatólica

(1) Modo irónico on
(2) Modo irónico off