Católicos
02/08/2011

El movimiento 15-M: buenas ideas pero falta de compromiso. La Iglesia se presenta como una alternativa para los jóvenes indignados

La actualidad gira estos días en torno a la juventud: se acerca la JMJ y siguen presentes movimientos mayoritariamente juveniles como el 15-M. Unos y otros manifiestan la necesidad de cambio y plantean un nuevo futuro. La JMJ será el momento de decir a los jóvenes que la Iglesia está con ellos.


 

"La indignación juega en el campo de la Iglesia y muchos jóvenes quieren oírlo" dice el sociólogo Juan María González Anleo. La juventud apuesta por la regeneración moral y cultural, por un futuro en el que se sientan incluidos y respetados. Por eso Gonzalez Anleo entiende que este clima de indignación mundial beneficiará a la Iglesia, ya que es una "oportunidad de oro" para dar a conocer los proyectos de la juventud católica. Así lo ha explicado durante los 'Encuentros de Vida Nueva'.

A esta mesa redonda también asistió Yago de la Cierva, director ejecutivo de la JMJ Madrid, que ha afirmado estar de acuerdo con el diagnóstico de los indignados pero no con el tratamiento. Ha dicho: "No soy la iglesia de los indignados",  pero si ha propuesto un programa de trabajo "muy fuerte. Basado en una cosa eminentemente cristiana: el compromiso".

Las claves del futuro que los indignados quieren construir deben basarse en la responsabilidad y el fortalecimiento de los vínculos. Los jóvenes del 15-M acuden a la familia, los amigos, "pero tienen un vínculo débil con la Iglesia", explica el sociólogo González Anleo. El siguiente paso es hacer de la fe un refugio para los indignados; un propósito difícil que el cardenal arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, ve con optimismo: "Por lo menos el movimiento 15-M nos ha hecho reflexionar. Ha sido un empujoncito".

En la última edición de 'Encuentros de Vida Nueva' también participaron el director adjunto de La Vanguardia, Enric Juliana; la presidenta del Foro de Laicos, Camino Cañon; el responsable de Magis, Abel Toraño y el director de Vida Nueva México, Jorge Traslosheros, todos ellos coordinados por Juan Rubio, director editorial de la revista.